Luis Suárez 'desnuda' a Marcelo Bielsa y avisa de una posible rebelión en el vestuario de Uruguay: "Los jugadores van a llegar a un límite en el que van a explotar"

Luis Suárez afronta los últimos años de su carrera centrado en el Inter de Miami, sólo unas semanas después de haber cerrado su capítulo en una Selección Uruguaya donde ya es leyenda. El delantero, sin embargo, dejó atrás su etapa como celeste con un sabor amargo. Así lo mostró en una entrevista para el medio 'Direct TV', en el que señala directamente a Marcelo Bielsa como principal responsable de la crisis interna que está viviendo el vestuario charrúa, donde su salida no ha sido la única.

Uruguay está inmersa en una etapa en la que las relaciones entrenador-jugador no pasan por su mejor momento. Ya el jugador del Inter de Milán Matías Vecino anunció su renuncia a la selección a comienzos de año, antes incluso de la Copa América, y asegura Luis Suárez que las cosas van de mal a peor en las concentraciones. Sobre todo, destaca la pérdida de trato con el cuerpo técnico: "¿La relación con Bielsa? Sólo profesional".

"La primera charla que tengo con él es del día previo a que me reintegre a la Copa América. La primera convocatoria que tuve en noviembre fue mediante un llamado del 'Profe' Ortega. Después, un dialogo que tuve en un entrenamiento que fue sobre una presión que yo estaba haciendo y una conversación que tuvimos en La Bombonera en el entretiempo con una situación que pasó con Darwin. Fue el único diálogo que había tenido con él hasta ese entonces, hasta que me convoca para la Copa América", advirtió, antes de relatar situaciones difíciles de creer durante una concentración.

"Muchos jugadores hicieron una reunión para pedirle al entrenador que por lo menos nos dijera 'buen día'. Ni saludaba. ¿Nadie se pregunta nada sobre por qué un tipo como Vecino con 30 años se fue de un día para otro? Es porque llegó a un límite de sentirse ninguneado y menospreciado", amplió Suárez, poniendo sobre aviso a sus compatriotas sobre la rebelión que podría tener lugar en su selección: "Que no sorprenda que haya más casos...".

"Ves que los jugadores van y no disfrutan", aseguró un Luis Suárez que reconoció que de lo vivido en la última Copa América de Uruguay se podría "hacer un libro". Desde su rol como capitán, de hecho, admitió sus reparos a la hora de referirse a Marcelo Bielsa durante las concentraciones: "Sabiendo que a él no le gusta lidiar mucho con los supuestos líderes o jugadores con experiencia, prefería evitarlo porque estaba la selección por encima. No quería ser partícipe de un problema. Sí sugerí cosas que a él nos se las dije, pero las daba a entender. Parecía que era preferible callarme en aquel momento para evitar un roce. Hubo situaciones en la Copa América que me dolieron mucho y había que callar por respeto a la selección en ese momento".

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"En la Copa América hubo compañeros que se plantearon no jugar más"

Esa misma Copa América ha estado muy cerca de suponer una oleada de renuncias, según Suárez: "Hubo compañeros que se plantearon no jugar más. Después te vas, sanas todo eso y vas porque quieres a tu país, a la selección y todos morimos por representar a nuestro país". La situación, no obstante, considera que es insostenible: "Los jugadores van a llegar a un límite en el que van a explotar".

Entre todas las peculiares de Bielsa, Luis Suárez contó el extremo control del cuerpo técnico actual respecto a los grupos que se reúnen para jugar a las cartas o la pérdida de ciertas tradiciones del vestuario: "Antes estábamos cenando o merendando y veías televisiones por todos lados mirando fútbol. Hoy en día hay una atrás, apagada y en silencio", comentó respecto al Complejo del combinado nacional.

Pero de todas las anécdotas sobresalió su 'encuentro' para fortalecer la unión del equipo en la Copa América después de todas las confrontaciones con los jugadores. "Yo como capitán fui a hablar con Marcelo", contó Suárez: "Fui a una conversación con él, me siento enfrente, le estoy hablando entre 5 ó 6 minutos más o menos, mirándolo a la cara y diciéndole que los jugadores estábamos con él, lo apoyábamos, íbamos a respetar sus decisiones, todo lo que iba a ser la convivencia... Me miró y me dijo 'muchas gracias, Luis'. Y me levanté y me fui. No conseguí ninguna respuesta", detalló en el programa, cerrando unas palabras que han desatado un terremoto en Uruguay.