Un niño de cuatro años destroza una vasija de 3500 años de antigüedad en un museo al querer saber qué había en su interior
Al final se ha librado de una multa que podría ser histórica
Madrid
Un niño de cuatro años de edad ha destrozado recientemente una vasija de 3500 años de antigüedad en el Museo Hecht de Haifa (Israel) al intentar descubrir lo que había en su interior. Así lo ha dado a conocer el propio museo a través de sus redes sociales, donde ha explicado que el objeto en cuestión, intacto desde que fuera creado durante la Edad de Bronce, ha quedado hecho trizas por la curiosidad del niño. De hecho ha compartido varias imágenes en las que se pueden ver los restos de la vasija, que tendrá que ser restaurada ahora por un equipo de especialistas antes de volver al lugar que le corresponde.
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Según cuentan los responsables del museo, este jarrón que se remonta al año 2200 antes de cristo se utilizaba principalmente tanto para almacenar como para transportar vino y aceite de oliva. Mientras que la mayoría de vasijas similares a estas se han encontrado rotas o incompletas, esta era muy especial para el museo porque había sobrevivido al paso del tiempo en perfectas condiciones.
La familia se ha librado de una cuantiosa multa
De ahí que los responsables de la pinacoteca se quedaran de piedra al ver la travesura del niño, quien sin embargo se librará de una sanción por no haberlo hecho de forma intencionada: "Hay casos en los que los objetos expuestos se dañan intencionadamente y estos casos se tratan con gran severidad, incluso involucrando a la policía. En este caso, sin embargo, no fue así. El frasco fue dañado accidentalmente por un niño pequeño que visitaba el museo y la respuesta será acorde".
Desde hace ya varios años, el Museo Hecht suele presentar sus hallazgos arqueológicos "sin obstrucciones" para que sus visitantes puedan interactuar con ellas de una forma mucho más natural: "Tiene un encanto especial". Sin embargo, esta filosofía puede provocar situaciones como la vivida hace apenas unos días, pues el pequeño acabó agarrándose de la vasija para descubrir lo que había en su interior. Así lo cuenta su padre en declaraciones a la BBC, donde reconoce que se quedó en shock después de ver a su hijo junto al jarrón roto: "Al principio pensé que no fue mi hijo el que lo hizo".
El museo ha invitado nuevamente a la familia
Tras asumir que sí que había su hijo quien había roto el jarrón, el padre de Alex se dirigió al guarda de seguridad para contarle lo sucedido. Por suerte, los responsables del museo entendieron a la perfección lo sucedido y no castigarán a la familia. De hecho, este mismo medio recoge que la pinacoteca ha decidido invitar a toda la familia para una visita organizada después del incidente ocurrido hace unos días.
Mientas tanto, la vasija pasará a manos de varios especialistas para que se encarguen de su recuperación. En este comunicado, el museo ha dado a conocer que han encargado la restauración al artista local Roy Shapir, quien contará con varias fotografías tanto del exterior de la vasija como del interior de la misma para que pueda replicarla y que vuelva al estado original. A pesar de lo sucedido, los responsables del museo aseguran que mantendrán su filosofía y que seguirán mostrando sus hallazgos sin ningún tipo de barrera para que cualquiera pueda disfrutar de los mismos en primera persona.
David Justo
(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología y buscador de historias virales e inverosímiles...