Analizamos el Cobra Pro: diseño, rendimiento y mucho más para uno de los mejores productos de Razer

Madrid

Hace aproximadamente un año, concretamente la última semana de junio de 2023, Razer presentaba en sociedad el Razer Cobra y el Razer Cobra Pro. Dos ratones inalámbricos, muy similares el uno del otro en lo que a diseño se refiere, pero que sin embargo llegaban al mercado con características muy bien diferenciadas para conquistar a dos públicos muy distintos. Mientras que el Razer Cobra estaba dirigido al jugador o la jugadora casual que no buscaba más que un ratón ergonómico y liviano para su día a día, los Razer Cobra Pro se convertían en una oda a la personalización para ese público más exigente que quiere disfrutar de una ventaja adicional durante su experiencia de juego.

Cuando está cerca de cumplirse este primer aniversario de estos dispositivos recibimos el Razer Cobra Pro para analizarlo en profundidad y compartir cuáles han sido nuestras sensaciones con el mismo. Y como viene siendo habitual con todos los productos que hemos podido probar hasta la fecha de la firma Razer, nos llama la atención por sus múltiples opciones de personalización. A continuación te contamos nuestra experiencia con este Razer Cobra Pro tras una semana de uso y cuáles son sus principales fortalezas y si hay algo que mejorar de cara a futuras versiones.

Packaging y diseño

El packaging del Cobra Pro es muy similar al del resto de productos comercializados por Razer, pues nos llega en una caja que se caracteriza por esos colores negros y verdes tan representativos de la firma estadounidense. En ella destacan tanto el nombre del producto como una fotografía del mismo y algunas de las características más destacadas del ratón inalámbrico. Entre ellas que tiene hasta diez teclas programables, 11 zonas de iluminación programables y un sensor óptico Razer Focus Pro 30K, uno de los más precisos del mercado. Si le damos la vuelta a la caja encontramos todavía más bondades sobre este ratón inalámbrico.

Entre otras cosas, la compañía destaca la calidad de los switches ópticos del ratón porque nos ayudarán a prolongar tanto la vida útil de sus teclas (más de 90 millones de clics) como su capacidad de respuesta ante cualquiera de nuestras peticiones. También su conectividad inalámbrica de última generación para que puedas disfrutar de todo tipo de juegos sin apenas latencia, algo fundamental sobre todo si tienes un perfil gamer, ya que una latencia baja puede marcar la diferencia entre ganar una partida o acabarla antes de tiempo. Tras este primer vistazo a packaging, abrimos la caja para ver que nos encontramos en su interior. Además del ratón, sin duda alguna el gran protagonista de esta review, la caja incluye otros complementos que serán realmente útiles durante nuestra experiencia con el dispositivo. Desde un cable USB-C para cargar nuestro ratón inalámbrico hasta un dongle inalámbrico USB que garantizará que nuestra conexión inalámbrica sea óptima.

Lo primero que nos llama la atención del ratón es lo ligero que es, ya que está compuesto principalmente de plástico y tan solo pesa 77 gramos . También su diseño, ya que se acopla perfectamente a nuestra mano para que podamos pasar horas y horas con el mismo sin sufrir ningún tipo de fatiga. La ergonomía es fundamental en este tipo de periféricos y, una vez más, Razer es consciente de ello porque ha sido capaz de desarrollar un producto que se convierte en una prolongación de nuestro cuerpo durante nuestras horas frente al ordenador. A esto hay que añadirle el espectáculo de luces que nos ofrece cuando lo encendemos por primera vez, algo sobre lo que te hablaremos a continuación.

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Configuración del Razer Cobra Pro

Tras este primer vistazo tanto a la caja como al producto en cuestión, lo encendemos para ver de qué es capaz. La instalación es de lo más sencilla. En caso de que vayas a utilizarlo como un ratón inalámbrico, tan solo tendrás que instalar en dongle sobre el que te hemos hablado antes en uno de los puertos USB del PC. En cuestión de segundos, el ordenador reconocerá el dispositivo y te animará a descargarte las aplicaciones oficiales de Razer para llevar la personalización del producto a un nuevo nivel. Desde el Chroma Connect hasta el Chroma Studio o el Chroma Visualizer, con los que podrás desarrollar tus propios patrones y que el ratón se encargue de reproducirlos cada vez que lo estés utilizando.

En caso de que prefieras utilizarlo como un ratón convencional, tan solo tendrás que conectar el cable USB-C que nos viene dentro de la caja tanto al periférico como al ordenador. Tanto en un caso como en otro, el ratón comenzará a brillar en varios colores distintos. Brillará el logo, la rueda del ratón y la parte inferior del mismo, dejando así una estela de colores que como te hemos explicado antes podremos modificar a nuestro gusto gracias a las aplicaciones facilitadas por Razer. Por si esto fuera poco, a día de hoy hay más de 200 juegos con integración Chroma, con los que podrás vivir una experiencia de colores todavía más inmersiva mientras juegas. Junto a esta rueda nos encontramos con los dos primeros botones de interacción que, por defecto, han sido configurados para aumentar o disminuir el DPI (sensibilidad del ratón). En caso de que vayas a jugar a un juego que requiera de una capacidad de reacción extrema, probablemente te vendrá bien subirle el DPI al ratón. Si por el contrario necesitas algo con lo que ser más preciso, bájale esta opción al mínimo para no fallar ni un solo disparo.

Pero, como te hemos dicho, ambos botones son configurables desde el software oficial de la compañía gracias a Synapse 3. Además de estos dos botones nos encontramos otros dos en el lateral izquierdo del dispositivo, que podremos usar por defecto tanto para ir atrás en el navegador como para ir adelante. También dos más en la parte inferior del ratón, donde podremos establecer si queremos que nuestro ratón funcione con conexión Bluetooth o de 2,4 GHz o incluso navegar entre los distintos perfiles configurados previamente en la anteriormente citada Synapse 3. De hecho, el ratón incorpora incluso un pequeño escondite para que podamos llevarnos el dongle a cualquier lado para garantizar esas conexiones inalámbricas óptimas.

Experiencia de uso

Desde un primer momento, el ratón se comporta a la perfección tanto cuando está conectado al cable como en su versión inalámbrica. Todo ello gracias, en parte, al anteriormente citado sensor óptico Razer Focus Pro 30K, con el que podremos llegar hasta donde otros ratones no son capaces de llegar. Tal y como apuntan desde la compañía, el ratón soporta aceleraciones de 70G y velocidad máxima de 750 IPS, convirtiéndose así en un gran aliado con videojuegos que requieran de mucha destreza con nuestras manos.

A esto hay que sumarle la tecnología Razer Hyperspeed Wireless, con la que podremos disfrutar del juego ultrasensible y de baja latencia con velocidades más rápidas que con otras tecnologías inalámbricas. Por otro lado, los switches ópticos del ratón funcionan a las mil maravillas y son de lo más precisos durante la experiencia de juego. También la rueda central del ratón, que nos parece una de las partes más ergonómicas del dispositivo junto a los laterales gracias a su configuración rugosa. Algo idóneo si eres de esas personas a las que les suda la mano más de la cuenta, pues nos garantizará un agarre adicional.

Por último, no podíamos poner punto y final a la review sin hablar acerca de la autonomía del dispositivo, ya que nos parece uno de los apartados más destacables de este ratón. Desde la compañía nos garantizan a una autonomía de hasta 100 horas en modo 1000 Hz con Razer HyperSpeed, por lo que no tendremos que preocuparnos de los cables en ningún momento. De hecho, es compatible con carga inalámbrica, por lo que podremos prescindir de todo tipo de cables en caso de que no te guste llevarlos encima.

Valoración final

El Razer Cobra Pro nos parece un ratón prácticamente perfecto por numerosos motivos. Nos encanta su diseño, su rendimiento y como no podía ser de otra forma, su autonomía. También sus múltiples opciones de personalización, ya que podremos reconfigurar prácticamente todo. Desde las luces del dispositivo hasta los botones del mismo. ¿Y qué mejoraríamos para la próxima versión de este dispositivo? Como te hemos dicho, nos parece prácticamente perfecto, así que lo único que haríamos sería hacerlo todavía más ligero.

Teniendo en cuenta que otros dispositivos de la compañía, como la versión Razer Cobra cableada, apenas pesa 58 gramos, consideramos que Razer puede ir todavía más allá a la hora de reducir el peso de su ratón. Pero, en líneas generales nos parece un ratón de lo más completo.