José Sacristán se fija en los que han acudido al rezo de Ferraz y les dedica una frase demoledora
El actor ha sido muy duro con la convocatoria frente a la sede del PSOE coincidiendo con las elecciones europeas
José Sacristán en La Colección / Javier Naval
José Sacristán ha sido muy claro a la hora de hablar de la convocatoria de un "rezo del Rosario" frente a la sede del PSOE este domingo 9 de junio, coincidiendo con las elecciones europeas.
El actor, uno de los grandes rostros de la interpretación en España, comentó en una entrevista la convocatoria, autorizada por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid a pesar de las circunstancias electorales. "Parece ser que hay un convocatoria para rezar el Rosario cerca de la sede del PSOE. Y precisamente Antonio Machado ya se refirió a esto, la gente se empeña en ponerlo de moda", comenta Sacristán.
"Ya hacía referencia don Antonio Machado a 'esta España inferior que ora y embiste cuando se digna usar la cabeza'", cita el intérprete, antes de cerrar su comentario demoledor: "Que tome nota el personal. Que tomen nota, porque más claro no podía ser el maestro Machado. Que tomen nota y que sepan que habrá otros comportamientos, otras conductas, a la hora de usar la cabeza".
Uno de los grandes poemas de Machado
El verso citado por Sacristán pertenece a uno de los poemas más destacados de la obra de Machado.
Se titula El mañana efímero y el poeta lo incluyó en la segunda ampliación de Campos de Castilla. Este es el poema completo:
La España de charanga y pandereta,
cerrado y sacristía,
devota de Frascuelo y de María,
de espíritu burlón y de alma quieta,
ha de tener su marmol y su día,
su infalible mañana y su poeta.
En vano ayer engendrará un mañana
vacío y por ventura pasajero.
Será un joven lechuzo y tarambana,
un sayón con hechuras de bolero,
a la moda de Francia realista
un poco al uso de París pagano
y al estilo de España especialista
en el vicio al alcance de la mano.
Esa España inferior que ora y bosteza,
vieja y tahúr, zaragatera y triste;
esa España inferior que ora y embiste,
cuando se digna usar de la cabeza,
aún tendrá luengo parto de varones
amantes de sagradas tradiciones
y de sagradas formas y maneras;
florecerán las barbas apostólicas,
y otras calvas en otras calaveras
brillarán, venerables y católicas.
El vano ayer engendrará un mañana
vacío y ¡por ventura! pasajero,
la sombra de un lechuzo tarambana,
de un sayón con hechuras de bolero;
el vacuo ayer dará un mañana huero.
Como la náusea de un borracho ahíto
de vino malo, un rojo sol corona
de heces turbias las cumbres de granito;
hay un mañana estomagante escrito
en la tarde pragmática y dulzona.
Mas otra España nace,
la España del cincel y de la maza,
con esa eterna juventud que se hace
del pasado macizo de la raza.
Una España implacable y redentora,
España que alborea
con un hacha en la mano vengadora,
España de la rabia y de la idea.
