Stella Maris: la descacharrante rave de 'La Mesías' bendice la primera comunión del Primavera Sound

Los guiris tuvieron que fliparlo muy fuerte porque, para quien no haya visto La Mesías, asistir a una actuación de Stella Maris —y más aún, en el Primavera Sound— ha de ser una experiencia muy desconcertante, además de religiosa, claro. El grupo de la serie de Los Javis, con Amaia Romero y Albert Pla al frente, ha protagonizado una de las actuaciones más bizarras, esperpénticas y divertidas de la historia del festival. Con un disco de electropop cristiano compuesto por el dúo Hidrogenesse (que también se ha sumado a la fiesta), las seis hermanas de Stella Maris convirtieron la jornada inaugural (y gratuita) del Primavera Sound en una auténtica rave multitudinaria en el precioso escenario del Parc del Fòrum de Barcelona. Escuchar Stella Maris a palo seco puede ser arduo, pero con la performance ideada por Los Javis —¡vaya genios!— todo encaja: versiones maquineras, vestuario a lo Sonrisas y lágrimas, coreografías descacharrantes, Albert Pla cantando Una experiencia religiosa (de Enrique Iglesias), los ampurdaneses Mainline Magic Orchestra liándola con sus llamativos disfraces, la familia Puig Baró felicitando la Navidad... Lo de Stella Maris no fue un concierto al uso, sino más bien una función multitudinaria de teatro musical y, a la vez, el verdadero final de temporada de la serie. Pero el punto álgido llegó con la aparición de Carmen Machi, transportada a hombros hasta el escenario en una especie de paso de Semana Santa. Fue entonces cuando La Mesías resucitó —con una colla castellera de fondo— para reivindicar la EDM (electronic dance music) católica. ¡Menuda primera comunión! Con buena parte del público aún en las interminables colas que se formaron para conseguir una cerveza (algo que la organización haría bien en revisar), los franceses Phoenix decidieron arrancar con su mejor canción: Lisztomania. Un despegue vertical en toda regla que dio paso a la ristra de hits que les ha convertido en una de las bandas imprescindibles para entender la música de las dos primeras décadas del siglo XXI: Lasso, Too Young, Ti Amo, Rome, If I Ever Feel Better... Su actuación, con momentos más rock y otros más electrónicos, estuvo a la altura de lo que se espera de un cabeza de cartel del Primavera Sound. La inconfundible voz de Thomas Mars suena igual de bien que hace 25 años y la banda está en plena forma, así que parece que hay Phoenix para rato. Pero la aparición —por sorpresa— de Ezra Koenig, vocalista de Vampire Weekend (la banda más destacada de la jornada de este jueves en el Primera Sound), aportó un extra de solemnidad a la ocasión. El concierto acabó con Thomas Bars dándose un baño de masas (literal) y con otro de los grandes temas de Phoenix: 1901. Así que la noche (también para los guiris) acabó muy bien.

Stella Maris: la descacharrante rave de 'La Mesías' bendice la primera comunión del Primavera Sound

Los franceses Phoenix culminaron la jornada inaugural con un concierto plagado de 'hits'

Carlos G. Cano

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