El PSG afronta este martes la vuelta de las semifinales de la Champions League ante el Borussia Dortmund en un partido en el que los franceses tendrán que darle la vuelta a la eliminatoria tras el 1-0 de la ida. En la rueda de prensa previa al choque, Luis Enrique ha asegurado que el equipo se encuentra con la confianza necesaria para remontar y, entre risas, ha reconocido que «vamos a ganar» es lo único que sabe decir en francés. Cuando le preguntaron por qué a los aficionados que vienen a aclamarle a la puerta del centro de entrenamiento les dice «on va gagner» (vamos a ganar) tiró de humor: «Es lo único que sé decir en francés. Y además lo creo». El técnico aseguró que ha preparado «a la perfección» el duelo de este martes, porque al no tener partido de liga han podido consagrar a ello todos los minutos, y señaló que el estado mental de la plantilla es bueno. Fiel a su estilo, no dio ninguna pista sobre la táctica, aunque evitó la presión de tener que marcar dos goles para superar la eliminatoria: «El objetivo no es ganar por dos goles, es ganar. Si pensamos que hay que marcar dos goles nos parecerá que está muy lejos. Hay que marcar uno y entonces la eliminatoria estará igualada», señaló. «Ahora hay un equipo eliminado, el PSG, pero en función del resultado eso puede cambiar. Nosotros vamos a jugar de la misma manera, pero el adversario puede adaptarse», explicó en rueda de prensa. Además, Luis Enrique trató de enmarcar el juego de Kylian Mbappé en el contexto general del equipo, pero reconoció que le gustaría «que los mejores jugadores, cuanto más participen en el juego, mejor». Además, animó a la afición parisina diciendo que «su papel va a ser vital, como ha sido toda la temporada. Tenemos la garantía plena de que la afición estará a tope con nosotros, como lo ha estado todo el año, sobre todo cuando más los necesitamos. El ambiente de Dortmund fue bonito, espero que aquí también lo sea», añadió. La versión más enfadada de Luis Enrique llegó cuando le preguntaron si se veía como favorito y si no se clasificaba para la final sería un fracaso. Luis Enrique, tras cambiar al gesto, respondió así: «Esta es una pregunta muy española, muy en vuestro estilo, vamos a lo negativo. ¿Qué puede ser lo peor? Continúa la vida, saldrá el sol. Cuando sale el sol en París es maravilloso. Nosotros, como deportistas, si no pasamos a la final, aplaudiremos al rival y le felicitaremos, aunque no lo merezca. Nos levantaremos jodidos, pero con orgullo, pensando en volverlo a intentar. Ese es el objetivo».