El Barça choca contra un sólido Chelsea que toma ventaja en semifinales

No pudo el Barça responder con victoria a la afluencia masiva de su afición para una cita señalada en la UEFA Women's Champions League. El Chelsea dio el primer paso hacia la gran final, sacando el máximo rédito del gol de Erin Cuthman con el que las inglesas adquieren ventaja en estas semifinales. Las culés no estuvieron finas en sus insistentes ataques y cayeron en las redes de un equipo que supo desconectar a sus mayores bazas ofensivas. El regreso de las recuperadas Graham Hansen y Alexia Putellas -esta última en el segundo tiempo- no bastó para solucionar un mediodía gris en Montjuic, que asistió a la primera derrota de las azulgranas en esta temporada.

La iniciativa del Barça puso a prueba los reflejos de Hannah Hampton desde el primer minuto del partido. Graham Hansen estuvo a punto de cazar el primero para las azulgranas en su primera ofensiva, una prometedora internada por banda izquierda que no llegó a conectar con limpieza la futbolista noruega en el interior del área. Partieron lanzadas las de Jonathan Giráldez, pero se toparon con un entramado defensivo muy serio y al que el plan le salió a las mil maravillas. Una voluntariosa Salma Paralluelo en la punta de lanza tampoco encontraba premio para sus remates y, sin haber conseguido dirigir ninguna tentativa entre palos, las británicas golpearon en una de sus primeras llegadas.

Tras la mejor jugada combinativa de las 'blues' hasta el momento Nusken se revolvió en el área local esperando la llegada de una compañera y Erin Cuthbert, incorporándose con todo desde segunda línea, enganchó el disparo con el que abrió el marcador a 5 minutos del descanso. Armó el gatillo la '22' con su pierna diestra y, favorecida por el ligero desvío en una Ingrid Engen que acudió a taponar su golpeo, acabó sorprendiendo a Cata Coll. También al poblado graderío que rodeó el estadio de Montjuic de un precioso ambiente (36.428 asistentes), que tras el 0-1 recibió un jarro de agua fría.

Un controvertido 'no penalti'

Tardó en levantarse de nuevo el FC Barcelona, que a la vuelta de vestuarios apretó para intentar embotellar a sus rivales. La amenaza era real y las barcelonistas llegaron a festejar la concesión de un penalti por unas claras manos en el interior del área inglesa después de un chut de Patri Guijarro. Sin embargo, cuando Mariona Caldentey ya se disponía a asumir la responsabilidad del lanzamiento, la colegiada Stéphanie Frappart recibió la alerta del VAR para comprobar dicha jugada, que terminó con la pena máxima invalidada y la señalización de un polémico fuera de juego de Salma Paralluelo, situada detrás de la defensora, que detuvo el balón con su brazo izquierdo.

No tuvo la suerte de su lado el Barça este sábado y, sin encontrar solución con el paso del cronómetro, comenzó a desesperarse. De hecho, tras un sinfín de ataques sin frutos, incluso las azulgranas tuvieron que agradecer el indulto de Mayra Ramírez, quien perdonó el segundo mano a mano ante Cata Coll tras un fugaz contragolpe. Con la ventaja mínima para las visitantes, el partido se agitó en el tramo final y, mientras el Chelsea contemporizaba el juego recurriendo a varias asistencias médicas y sin renunciar a poner tierra de por medio a la carrera, también el Barça tuvo en sus botas el empate. Salma Paralluelo, un imán recibiendo los servicios culés al área, no pudo finalizar bien un envío aéreo que la encontró sola en el segundo palo. Tampoco pudo superar la arriesgada salida de la portera visitante para taponar una rápida transición en el descuento. Además, el destino deparó un final cruel para las culés, que en la última acción del partido vieron cómo Alexia Putellas enviaba un balón muerto en el área a centímetros de la portería. Sin acierto de cara a puerta, el FC Barcelona asume cuentas pendientes de cara a la vuelta en Londres, donde tratará de sobreponerse al 0-1 adverso para repetir final de la Champions League.

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