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Los requisitos del SEPE para conseguir hasta 500 euros mensuales con la Renta Activa de Inserción

La Renta Activa de Inserción (RAI) es una ayuda pública para desempleados de larga duración

Oficina del paro en Andalucía/ Rocío Fernández/ EP

Oficina del paro en Andalucía/ Rocío Fernández/ EP

Madrid

El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) ofrece ayudas económicas a personas desempleadas en situaciones vulnerables. Más allá del paro o el Ingreso Mínimo Vital, el organismo dependiente del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ofrece la Renta Activa de Inserción (RAI), una prestación que otorga hasta 500 euros mensuales y puede extenderse por 33 meses.

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La Renta Activa de Inserción es una ayuda especial a la que no pueden acogerse todas las personas desempleadas, ya que hay que cumplir una serie de requisitos imprescindibles para adquirir la prestación. Está dirigida a personas desempleadas de larga duración que han agotado el resto de formas de ayuda pública y cuenta con unos criterios básicos.

Primero, se debe estar registrado en el SEPE como demandante de empleo, manteniendo la inscripción durante todos los meses que dure la prestación. Hay que tener menos de 65 años y no contar con ingresos mensuales que superen el 75% del salario mínimo interprofesional (que actualmente se encuentra en 1.134 euros en 14 pagas).

Además, si se tiene cónyuge, hijos menores de 26 años o mayores con discapacidad, o menores bajo acogida, se considera que se cumple con el requisito de carencia de rentas si el total de ingresos de la unidad familiar dividido por el número de miembros no supera el 75% de este SMI. Las personas demandantes de empleo que hayan sufrido violencia de género, doméstica o sexual pueden acceder a la Renta Activa de Inserción si cumplen con estos requisitos y no han sido beneficiarias de tres programas anteriores de inserción ni conviven con la persona agresora.

Grupos beneficiarios de la RAI

La Renta Activa de Inserción está dirigida principalmente a estos cuatro grupos de población que encuentran dificultades para conseguir empleo:

  • Personas desempleadas de larga duración de más de 45 años. Siempre que lleven inscritos en la oficina de empleo durante al menos 12 meses y habiendo realizado, al menos, tres búsquedas activas de trabajo.
  • Personas emigrantes retornadas mayores de 45 años. Aquellas que han regresado a España en los últimos 12 meses y pueden demostrar haber trabajado en el país al que emigraron anteriormente durante al menos 6 meses.
  • Personas víctimas de violencia de género o doméstica. Este grupo de personas tiene derecho a solicitar la RAI sin necesidad de dejar pasar un año entre una ayuda y otra.
  • Personas con discapacidad. Pueden acceder a la RAI si cuentan con una certificación que demuestre un grado igual o superior al 33% de discapacidad y han mantenido su condición de demandantes de empleo durante al menos 12 meses.

Esta ayuda de 500 euros mensuales, que puede cobrarse desde el día siguiente a la solicitud, tiene una duración máxima de 11 meses que se pueden extender hasta 33, siempre y cuando se mantengan cumpliendo todos los requisitos establecidos.

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