Una cadena de restaurantes se inventa una 'tarifa de marca' para quedarse las propinas antes de que cambie la ley que les obliga a dárselas a los camareros

Dejar propina en los restaurantes de Londres no es ni mucho menos obligatorio. Sin embargo, es bastante habitual dejar entre un 10 y un 15% de la cuenta como propina para agradecer un servicio excepcional. Mientras que algunos locales aplican automáticamente un cargo estándar de servicio del 12,5% en la cuenta, otros indican en una nota que el servicio no está incluido para que sea el propio cliente quien pague ese 10 o 15% de la cuenta mediante propinas para los camareros que les han servido. A pesar de que estas propinas deberían ser para quienes les han atendido, estas suelen acabar en manos del empresario o empresaria en cuestión. Con el objetivo de frenar este tipo de abusos, el gobierno de Reino Unido aprobaba hace cerca de un año una nueva legislación que obligará a los establecimientos a entregar a sus empleados el 100% de las propinas. A pesar de que todavía quedan varios meses para que entre en vigor, pues no se aplicará hasta el próximo 1 de julio, algunas compañías han comenzado a moverse para no perder ese dinero fijo al mes. Es el caso de la cadena de restaurantes londinense Ping Pong, quien ha sido duramente criticado durante estas últimas horas después de prohibir las propinas para evitar que se las queden los empleados para posteriormente anunciar una «tarifa de marca». Tal y como recoge The Guardian en su página web, este nuevo cargo opcional del 15% se destinaría a «honorarios de franquicia y otros gastos relacionados con la marca». Un cargo que reemplazaría al comentado anteriormente del 12,5% que, a partir del 1 de julio, será destinado de manera íntegra para el personal del establecimiento. Por el momento no es más que una idea que se está probando como alternativa al aumento de los precios del menú. De hecho, la compañía asegura que «revisará todos los comentarios constructivos antes de tomar una decisión final» el próximo mes de junio. En ese momento, la cadena de restaurantes decidirá si hacer obligatoria dicha tarifa, si aumentar los precios de los productos o si directamente implementarán una combinación de ambos para no perder esa cantidad de dinero fija al mes. Mientras tanto, la empresa matriz de la cadena, AJT Dimsum, ha asegurado que ha aumentado los salarios del personal un 19% en los últimos meses para alcanzar el nuevo mínimo legal, lo que «igualaría los ingresos que habrían recibido con las propinas de cada servicio a partir del próximo mes de julio». Por otro lado, la compañía ha asegurado que el personal de cada uno de sus restaurantes podrá ganar una o dos libras adicionales cada hora en bonificaciones en función de los objetivos de venta que consigan a diario. Sin embargo, desde el sindicato Unite consideran que este tipo de medidas podrían sentar un precedente cuanto menos peligroso. Según Bryan Simpson, uno de los portavoces del mismo, ofrecer solo una libra más por encima del salario mínimo para reemplazar «una propina saludable por hora» es «una completa bofetada» para los trabajadores. Bajo su punto de vista, la medida llevada a cabo por la cadena de restaurantes es «uno de los ejemplos más flagrantes de robo de propinas» con el que se ha topado como sindicato de trabajadores de bares y restaurantes: «No importa cómo lo llame la dirección de la compañía, los clientes asumirán que este 15% es una propina que debería llegar a los trabajadores, pero no es así. Eso es completamente falso». De ahí que el sindicato haya puesto en marcha una campaña a nivel nacional para garantizar que los restaurantes no sigan los pasos de Ping Pong y reemplacen el cargo de servicio con «políticas escandalosas». Sigue el canal de La SER en WhatsApp, donde encontrarás toda la información, el deporte y el entretenimiento: la actualidad del día y las noticias de última hora, los mejores vídeos y momentos de la radio, entrevistas, reportajes y mucho más.

Una cadena de restaurantes se inventa una 'tarifa de marca' para quedarse las propinas antes de que cambie la ley que les obliga a dárselas a los camareros

Ha sucedido en Ping Pong, en Londres. Allí la ley obliga a partir del 1 de julio a dárselas íntegras al personal. Desde los sindicatos londinenses anuncian medidas para hacer frente a este tipo de políticas escandalosas

David Justo

Webs de PRISA