Von der Leyen alerta del peligro de la extrema derecha al ser escogida cabeza de lista del Partido Popular Europeo

Ursula von der Leyen ha recibido el respaldo sin fisuras del Partido Popular Europeo para volver a ser presidenta de la Comisión Europea, cargo al que accedió sin ser en su momento la persona designada por el grupo conservador. Este año no hay dudas en el PPE, que cierra filas en torno a Von der Leyen, quien en su discurso ante los delegados del partido de todo el continente en Bucarest ha hecho equilibrios entre la influencia creciente en Europa de dirigentes radicales como la italiana Meloni o la fuerza que las encuestas dan a la extrema derecha en Francia y la posibilidad de que los conservadores se abran a pactos con ellos después de las elecciones europeas de junio.

"Estamos siendo retados como nunca antes por populistas, nacionalistas y demagogos, sean de extrema derecha o de extrema izquierda", ha dicho Von der Leyen, quien ha puesto como ejemplo de ese riesgo a los ultras de Alternativa para Alemania o a la Agrupación Nacional francesa. "Los nombres pueden ser distintos, pero sus objetivos son los mismos: pisotear nuestros valores y destruir Europa". Von der Leyen ha situado a los populares europeos como un muro de contención frente a los extremismos, "nosotros nunca permitiremos esos objetivos", ha dicho, si bien en los últimos meses ha mostrado su sintonía por ejemplo con Meloni en relación a la política contra los inmigrantes del gobierno italiano.

Sin referencias explícitas a los gobiernos europeos que no son especialmente críticos con Putin, como los de Hungría o Eslovaquia, Von der Leyen ha avisado de la existencia de "amigos del presidente Putin aquí en casa" que, según Von der Leyen, "están tratando de reescribir nuestra historia y secuestrar nuestro futuro".

Los mensajes de Von der Leyen contrastan sin ir más lejos con la intervención de ayer en este mismo congreso de Isabel Díaz Ayuso, quien pidió a la candidata germana que no estreche lazos con Pedro Sánchez o criticó la decisión de Francia de incluir el derecho al aborto en su Constitución. Sí que la actual presidenta de la Comisión ha defendido una Europa que defienda "la tradición". Después de su discurso ha llegado la votación en la que de 499 votos emitidos, 400 han sido a su favor, 89 en contra y 10 nulos.

Respaldo a la nueva política de Defensa

Von der Leyen ha hecho especial hincapié en la necesidad de que la Unión Europea incremente su gasto estratégico militar, algo que va en consonancia con la política actualizada de Defensa que esta misma semana ha presentado la Comisión y que plantea un sistema de compras conjuntas de equipamiento militar. Unos argumentos que desembocan en el principal anuncio que de momento ha hecho la candidata conservadora: crear el puesto de Comisario o Comisaria de Defensa.

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Sin abrir la puerta al envío de tropas o ayuda más directa a Ucrania, Von der Leyen ha repetido el mantra de que la Unión estará junto al gobierno de Zelenski el tiempo que sea necesario al tiempo que ha cargado duramente contra Vladimir Putin, sobre todo después de la muerte del líder opositor ruso Alexei Navalni. "Él es responsable por la muerte de Navalni y es sobrecogedor comprobar la valentía de quienes acudieron a su funeral", ha dicho la política alemana, que ha subrayado además el acercamiento de países de la antigua esfera soviética como Moldavia o Georgia hacia una integración en la Unión Europea.

Escepticismo en la izquierda

Las palabras de Von der Leyen le pueden situar en una posición complicada si después de las elecciones europeas el PPE necesita mirar hacia la extrema derecha, que figura muy destacada en las encuestas de varios países, siendo ahora la opción favorita para la victoria en lugares como Austria, Francia, Italia o los Países Bajos.

No puedes enarbolar con una mano la bandera de Ucrania y con la otra negociar con Orbán, que fue el principal obstáculo para aprobar el último paquete de ayuda

—  Iratxe García, eurodiputada socialista

Hoy mismo, la líder de los socialdemócratas en el Parlamento Europeo, la española Iratxe García, ha mostrado su desconfianza por el rumbo que tome Von der Leyen. "¿Va a negociar con los socialistas la agenda verde y con los conservadores y reformistas que no va a hacer nada en la agenda verde?", se ha preguntado García haciendo referencia a las políticas medioambientales que también ha respaldado Von der Leyen, pero no cuentan con el apoyo de la extrema derecha comunitaria.