El fiscal Ignacio Stampa: "El caso Tándem es el caso de mi vida; condicionó mi salud, mi forma de ser y la existencia de los que me rodean"

Madrid

Investigar al ex comisario José Manuel Villarejo y todo lo que le rodea tiene costes enormes. Lo sabe el fiscal Ignacio Stampa que hoy trabaja en la Fiscalía Provincial de Madrid, pero que durante los años que estuvo en la fiscalía Anticorrupción fue el encargado de la investigación del caso Tándem junto a su compañero Miguel Serrano. "Ha condicionado mi vida personal, mi salud y mi forma de ser durante mucho tiempo. Todo eso absorbía", cuenta en una entrevista con Aimar Bretos en Hora 25. "Es el caso de mi vida porque fue el que más me condicionó la existencia y la de los que me rodean, que es lo más importante del mundo".

Stampa acaba de publicar 'El Complot', con la editorial 'La Esfera de los libros', donde cuenta cómo vivió todo ese caso, todo lo que pasó en él y todo lo que le pasó a él. "Habíamos oído hablar del comisario Villarejo y sabíamos que aparentemente había intervenido en algunos supuestos, algunos casos que estaban judicializados, aparentemente escandalosos. Cuando entramos en su casa y abrimos la caja fuerte y nos encontramos aquella fonoteca de todas las modalidades de los últimos 30 años es cuando definitivamente decimos: esto es tan grande como podíamos imaginar".

Lo primero que pensó, recuerda, fue: por qué él. Stampa estaba en comisión de servicios, no tenía plaza fija, y el jefe de Anticorrupción de entonces, Manuel Moix, le encargó investigar al hombre más misterioso del momento en el mundo político y policial. "Nosotros le hemos visto muy de cerca. Se da la circunstancia de que no teníamos su cara. Es decir, cuando se preparó un operativo de este nivel a nivel policial y se localizan los objetivos para proceder, las detenciones y a los registros, nosotros no teníamos una foto de él". Y ahí empezó todo. "Luego la persona de José Manuel Villarejo, pues es una persona que tiene mucho halo de misterio tanto en sí mismo como el que él se da, pero yo creo que conseguimos interpretarle bastante Miguel Serrano y yo. Le he registrado su casa dos veces, le he registrado su celda. Entonces he llegado a interpretar el personaje porque en la mayoría de sus escritos y sus alocuciones estamos acostumbrados a oírle lanzar muchos mensajes, amenazas veladas. Nosotros sabemos interpretarlo de forma que creo sinceramente que no todo el mundo es capaz de interpretar, porque como luego nosotros lo hemos visto en muchas facetas, a veces le interpretamos al revés de lo que dice él".

Cómo es Villarejo

¿Conduce eso a algún tipo de fascinación? ¿Deslumbró Villarejo al fiscal? Él lo niega rotundamente. "No, en absoluto, no me ha deslumbrado. Yo no sé si le he pedido no sé cuántos años de prisión, no me puede deslumbrar una persona así. Sí que me parece una persona muy inteligente. A nosotros nos parecía una persona muy inteligente, con un don de gentes extraordinario, un poco desleal, porque, claro, él utilizaba la estrategia de que somos amigos de confianza, pero te está grabando, porque ha grabado a todas las personas con las que ha estado, incluso incluidos amigos suyos. Pero él a nosotros nos ha despreciado, no minusvalorado, nos ha despreciado. El otro día vi en un reportaje de televisión que nos llama chusma. Bueno, nosotros le hemos considerado siempre con absoluto respeto. Es inteligente y además es listo, que no es lo mismo".

Sí que asegura Stampa que Villarejo tiene grabado absolutamente todo. "Tiene copias de todo y lo que es una evidencia es que ha salido publicado material que no estaba en el sumario. Durante mucho tiempo se jugó con esa estrategia de filtrar cosas desde fuera para atacar al procedimiento y decir que éramos los fiscales, pero ese material no estaba". Sobre esos ataques al procedimiento, habla Stampa de una "estrategia diabólica" para tumbar el caso. "Nos volvían locos porque teníamos que mirar los digitales para ver qué escándalo se publicaba".

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Ataques al procedimiento

En 'El Complot' cuenta el fiscal cómo los ataques al procedimiento fueron siendo redirigidos a dinamitar su presencia en el mismo. "La verdad de lo que me pasó es esa, después de documentar y de contrastar todo lo que ocurrió. Pero luego hay más verdad que es la que me ocultan desde la Fiscalía General del Estado, porque no me dan toda la información. Por eso estoy litigando en los tribunales por obtener toda la información", dice Stampa, que durante aquella investigación no contaba con plaza fija en Anticorrupción sino que estaba en comisión de servicios. Cuando optó a esa plaza fija, había abierta una investigación al fiscal por supuesta revelación de secretos, ya que la prensa había publicado que mantenía una relación con la abogada de Podemos, Marta Flor, personada en el caso Tándem. Sostiene Stampa que la entonces Fiscal General del Estado, Dolores Delgado, y el fiscal jefe de la secretaría técnica, Álvaro García Ortiz (actual Fiscal General del Estado), maniobraron para que no consiguiera los apoyos en el Consejo Fiscal para conseguir esa plaza. "Soy un fiscal, no el único, pero soy un fiscal que se atreve a publicar lo que le han hecho los dos últimos fiscales generales del Estado". Está convencido Stampa de que tanto Delgado como Ortiz han leído su libro. "No solamente lo han leído, escuchan todas mis entrevistas".

En la votación del Consejo Fiscal para conocer los apoyos que tenía cada candidato a la plaza fija, Stampa no logró ningún voto a favor. "La razón que dio Dolores Delgado para no proponerme fue que no obtuve ningún voto. Qué casualidad que Luis Navajas, después de aquellas declaraciones tan duras que hizo contra mí (luego se retractó públicamente con una carta), reconoció que se había dejado llevar por maledicencias y que creyó noticias que después supo que eran falsas. Pero después de hacer esas manifestaciones, evidentemente, pues algo pasó para que no le dejaran votar. Y eso es lo que yo quiero saber". "La verdad es que fue el cúmulo de irregularidades y de trampas, entre comillas, que me hacen cuando me investigan a mí y todas las dilaciones que se producen para dejarme a mí manchado y, digamos, justificar la coartada de echarme de Anticorrupción. Cuando yo estoy litigando y no me dan en mi propia casa la documentación imprescindible para poder defenderme", dice el fiscal, en referencia a las comunicaciones entre fiscales que quiere ver para saber cómo se llevaron a cabo las órdenes internas durante su investigación dentro de la fiscalía.

El libro, concluye Stampa, no ofrece datos nuevos del caso Villarejo. No revela información que no podría revelar. Cuenta, cogiendo la información que se ha publicado, dándole contexto y poniéndola en su propia piel, un caso que le marcó para siempre. "Es una forma de decirle al lector: interpreten ustedes, junten ustedes todas las piezas del puzle y lleguen ustedes a una conclusión".