¿Se puede hackear una planta? Planet Biotech, el proyecto que pretende proteger los cultivos de las sequías
Se han asomado a 'La Ventana' los revolucionarios de 'Planet Biotech' una startup que altera químicamente las plantas para combatir la sequía mediante la aplicación de una moléculas
Las últimas lluvias han elevado la reserva hídrica de España al 53% aunque algunas continúan con problemas como la Cuenca Mediterránea Andaluza y la catalana. La sequía es un problema y si no llueve, y no regamos, las consecuencias en la fruta, la verdura y en las plantas en general, es más que evidente.... o no.
La solución puede pasar por la aplicación de unas moléculas que son capaces de revolucionar la agricultura para conseguir que las plantas o cultivos crezcan y se desarrollen incluso en entornos de poca agua. "Las plantas tiene una mayor capacidad de adaptarse y ser más resilientes al cambio climático. Y lo que nosotros hacemos es preparar las plantas para que sean más tolerantes al estrés que se avecina bien sea por sequía o por una ola de calor", nos dice Ana Caño-Delgado, revolucionaria, científica de plantas y CEO de 'Planet Biotech'. Esta startup lo que busca son las teclas, es decir, los genes, que llevan 20 años estudiando y que algunos los han identificado como claves para que la planta pueda tolerar la sequía.
En 2018 descubrieron que se podían retocar algunos genes sin alterar su producción. "Después de estar 20 años estudiando los genes de la plantas ahora lo que hacemos emular el proceso de los cambios genéticos con moléculas, que son naturales porque los tiene la planta, pero que se pueden añadir para potenciar ese efecto", nos dice Ana Caño-Delgado. "Lo que hacemos, de alguna manera, es activar la producción de metabolitos en la planta de forma química pero no genética. Nuestras moléculas tienen efecto inmediato y a las dos horas ya se pueden ver cambios en la fisiología de las plantas".
Objetivo 2026
Esta startup tiene una planta modelo, su ratón de laboratorio, que es "La arabidopsis thaliana", que es como una especie de rúcula o mala hierba que crece deprisa, cierra su ciclo biológico deprisa y produce muchas semillas lo que permite hacer más test. Si lo tuvieran que hacer con tomates o cereales todo sería más complicado.
"La ventaja que tiene trabajar con esta planta modelo es que la genética de los organismos vegetales está muy conservada y muchos de los procesos biológicos que ocurren en unas plantas se repiten en otras especies. Por eso, lo que ocurre en esta planta modelo se puede extrapolar a lo que pasa con el trigo, por ejemplo", nos explica la CEO de 'Planet Biotech'. En este momento están realizando los pilotos para proceder al registro del producto y esperan que el fármaco de las plantas esté listo para usarse en 2026.
Marta Estévez
Productora y redactora de la Ventana. Ligada a la Cadena Ser desde 1992 donde ha trabajado en programas...