La Aemet alerta de un cambio en el tiempo para el inicio de diciembre: estas serán las zonas más afectadas
La semana comenzará una nueva jornada de precipitaciones intermitentes que darán comienzo el lunes y el martes en el tercio norte y Baleares e irán cogiendo intensidad a medida que se vayan acercando al Cantábrico
Un grupo de personas caminan bajo la lluvia en la Plaza de Europa de Gijón. EFE/ Juan González / Juan González (EFE)
Madrid
Este fin de semana los cielos despejados destacarán en gran parte de la península ante una situación anticiclónica que solo dejará nieblas matinales en los valles atlánticos, en la meseta Norte y en las montañas del norte, según la Aemet.
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En las zonas del Cantábrico oriental, en las Baleares y en los litorales catalanes no se descarta algún chubasco e intervalos de vientos fuertes que soplarán tanto en Ampurdán, en el este de Baleares, bajo Ebro y en el nordeste del litoral norte de Galicia. En Canarias también se esperan precipitaciones en las islas montañosas acompañadas de un banco de niebla y una bajada de las temperaturas.
Las precipitaciones marcan el inicio de la semana
La semana comenzará con una nueva jornada de precipitaciones intermitentes. Las lluvias darán comienzo el lunes y el martes en el tercio norte y Baleares e irán cogiendo intensidad a medida que se vayan acercando al Cantábrico oriental llegando incluso a nevar en la zona de los Pirineos.
Las precipitaciones vendrán acompañadas de nieblas matinales en las zonas de la vertiente atlántico y vientos de componentes norte y oeste, con intervalos de fuerte en Ampurdán, bajo Ebro, Baleares y, en menor medida, en litorales cantábricos, Estrecho y Alborán. En las zonas montañosas se experimentarán heladas débiles en la meseta Sur y más intensas en los Pirineos.
Aunque durante el martes se espera una jornada sin apenas chubascos, a partir del miércoles es muy probable que lleguen las lluvias en los tercios noroeste y oeste de la península, que irán avanzando hacia el este afectando a todo el territorio, con menor probabilidad al sudeste. En las zonas montañosas del norte no se descarta que las precipitaciones se conviertan en una nevada.
