Atajar el fuego

Madrid

El humo procedente de los incendios forestales en Canadá llegó esta semana a España y a otros países europeos. Por ahora, se sitúa tan alto que, según los expertos, no está afectando a la calidad del aire que respiramos. Pero los incendios siguen arrasando grandes bosques de Canadá. El domingo pasado se detectaron 53 nuevos focos y el lunes, otros 27 y eso que la temporada de incendios en Canadá no alcanza su punto máximo hasta finales de julio o principios de agosto. Falta quizás por llegar lo peor. Los expertos advierten que los bosques que están ardiendo habían servido ya a lo largo de siglos como sumidero de carbono. Es decir, los bosques que ahora arden habían capturado miles de millones de toneladas de carbono que ahora liberan de nuevo en la atmosfera y que contribuyen al calentamiento global y a aumentar las condiciones para que más bosques se quemen, explica la agencia Reuters, en una especie de retroalimentación muy peligrosa. Habrá que cruzar los dedos y esperar que el cambio de administraciones autonómicas y municipales en España no afecte a los preparativos para hacer frente a lo que se viene encima. Ahora todos, al margen de ideologías o colores, deberán estar pendientes de lo más importante: disponer de los medios para atajar el fuego y lograr pasar este dificilísimo verano.