Carles Sans: "Julio Iglesias no ha valorado nuestra versión del 'Soy un truhan, soy un señor"

Madrid

Carles Sans comienza la entrevista en El Faro de Mara Torres a los pies del Mediterráneo, recordando sus años adolescentes de pachangas de fútbol e inocentes ligoteos. Pero en esa época también empezó a hacer sus primeros pinitos en televisión porque "alguien le dijo a su madre que era un niño muy mono" y se pasó gran parte de su infancia haciendo anuncios: "Se pagaban bien y ese dinerillo nos venía muy bien en casa, pero nunca imaginé que terminaría siendo actor".

Desde el año 79, estuvo junto a Joan Gràcia y Paco Mir al frente de Tricicle, la compañía de teatro gestual que ha estado hasta el 2018 llenando de humor los teatros. Empezaron sus representaciones en salas independientes y en los 80 debutaron en el Un, dos, tres: "Nos marcó la vida. Chicho vino a vernos a un teatro pequeñísimo detrás de Plaza de España, la Sala Cadarso, donde venían a vernos cuatro espectadores, y un buen día nos dijo que fuésemos a su programa". Era la época gloriosa de la televisión, con audiencias de 20 millones de espectadores, así que el salto a la fama fue inmediato: "El día que emitieron el programa estábamos en Palma de Mallorca y la gente nos señalaba en el aeropuerto, incluso un guardia municipal se puso a bailar la canción de Julio Iglesias". La presentadora le ha preguntado si alguna vez el artista llegó a pronunciarse sobre su actuación, a lo que ha respondido con la misma gracia que indignación: "Un día se la pusieron en Televisión Española e intentó bailarla, pero nunca dijo nada".

Actualmente tiene un monólogo llamado Por fin solo donde relata, en solitario y a viva voz, algunas de las mejores anécdotas de la compañía que tantas alegrías y éxitos le ha dado: "Había que poner el chimpún a Tricicle, pero yo me pregunté si quería ponerle el punto y final a mi carrera. Llegué a la conclusión de que quería hacer algo por mí mismo", ha explicado el actor.