Putin abronca a los nuevos embajadores de Estados Unidos y la Unión Europea en Moscú

Un enorme salón en el Kremlin en el que los embajadores han tenido que permanecer de pie, Vladimir Putin en el centro, techos altísimos y mensajes directos uno por uno. El presidente ruso ha aprovechado la entrega de credenciales de 17 embajadores para hacer un repaso de la actualidad internacional y, en concreto, para justificar la invasión de Ucrania. Y es que la ocasión era especial, ya que entre los presentes estaba la nueva embajadora de Estados Unidos en Moscú Lynn Tracy, así como el nuevo representante de la Unión Europea. "Las relaciones con Estados Unidos atraviesan una profunda crisis", ha dicho Putin mirando directamente a Tracy, para añadir después que, en su opinión, "el apoyo de Washington a revoluciones de colores como la de 2014 en Kiev han llevado a la crisis actual y al deterioro de las relaciones bilaterales". Tracy aguantaba el tipo con unos cascos en sus oídos para escuchar la traducción del mensaje de Putin.

Después le ha llegado el turno al embajador europeo, Roland Galharague: "estaremos de acuerdo en que nuestras relaciones están severamente deterioradas" y también ha culpado a los 27 de tensar las relaciones internacionales. Para terminar la recepción, Putin se ha dirigido al nuevo embajador danés, al que ha pedido que apoye la creación de una comisión independiente para la investigación de las explosiones en el gasoducto Nord Stream, y ha advertido al de Noruega del deterioro también de sus relaciones.

Después de todo el repaso, sin embargo Putin ha dicho que la intención de su país es mantener una relación equilibrada y permanente con todos los países, "sin excluir a nadie".

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Diplomacia en paralelo en China

Mientras Putin se dirigía a los nuevos embajadores en Moscú, otros frentes diplomáticos estaban también en marcha. Por un lado, ha terminado la reunión de ministros de Exteriores de la OTAN en la que ha participado Finlandia por primera vez, adhesión que también ha molestado a Rusia. Al acabar, el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, ha subrayado que Rusia es cada vez más dependiente de China y ha pedido al país asiático que no ayude militarmente a Moscú, paso que según él "sería un gran error y tendría graves consecuencias".

Precisamente la presidenta de la Unión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente francés, Emmanuel Macron, inician este miércoles una visita oficial de tres días a China. Este jueves será el día de las reuniones al más alto nivel con el presidente chino Xi Jinping, pero antes tanto la diplomacia europea como el propio Macron han subrayado la necesidad de lograr espacios de entendimiento con China. La Unión Europea ha anunciado un endurecimiento de su estrategia comercial con el gigante asiático, pero en este encuentro Von der Leyen tratará de reforzar los lazos con Pekín.

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