"La vida es muy bonita, sólo hay que saber mirar": la lección de bondad que ha hecho emocionarse a la actriz Toni Acosta

Se acerca la Navidad y los días en los que podemos disfrutar de la familia. Eso es lo que hizo la actriz Toni Acosta este pasado finde de semana con sus hijos. Acudió a patinar sobre hielo en una pista de Terrassa (Barcelona), y fue allí donde asistió a una escena que le hizo emocionarse hasta las lágrimas. Lo cierto es que ella no se dio cuenta hasta que su hija le llamó la atención sobre lo que estaba ocurriendo sobre la pista de patinaje. Una niña patinaba empujando la silla de ruedas de su hermano, que estaba colocada sobre una plataforma de plástico que le permitía deslizarse por el hielo. Ambos hermanos disfrutaban de la diversión y Toni Acosta se emocionaba viendo la escena: «Me puse a llorar. Me caían las lágrimas sonriendo al mismo tiempo. Me parecía el mejor anuncio de la bondad, de los cuidados, del amor». Así contaba el episodio la actriz en su perfil de Instagram: «La hermana seguía haciendo reír al chico, patinando a su alrededor haciendo piruetas, él disfrutaba tanto, tanto, tanto... ». Acosta quiso dar difusión a la escena que acababa de vivir y preguntó a la familia si podía compartir el vídeo. Se hizo una foto con toda la familia; la niña que empujaba la silla de ruedas era Nora, de 13 años; y el que disfrutaba sentado era Arnau, de 16. Para la actriz detrás de este momento de ocio en familia hay toda una lección de bondad y vida: «La tarde del domingo yo aprendí mucho. Que viva Terrassa y su gente. La vida es muy bonita, sólo hay que saber mirar». Así contaba la actriz en su cuenta de Instagram lo que vio en la pista de patinaje de Terrassa a la que había ido con sus hijos a patinar: «Esta historia es más bonita que una película porque es verdad. Estamos en Terrassa el domingo por la tarde y mis hijos quieren patinar en la pista de hielo. Yo no. A pesar de parecer »cómica sin cabeza« tengo dos proyectos entre manos y no puedo permitirme una caída, un esguince. Me quedo fuera, grabando y disfrutando. Viene mi hija y me dice »mami mira qué bonito« y yo digo »¿el qué?« Y me dice »los hermanos!«. Y me fijo. Lo mejor de esta escena es que hasta ese momento a mí me había pasado desapercibida. Me puse a llorar. Me caían las lágrimas sonriendo al mismo tiempo. Me parecía el mejor anuncio de la bondad, de los cuidados, del amor. Luego entró en la pista quien yo pensaba que era el padre y sustituyó a la niña empujando al hermano. Ni siquiera llevaba patines. Empujaba a su hijo en deportivas. La hermana seguía haciendo reir al chico, patinando a su alrededor haciendo piruetas, él disfrutaba tanto, tanto, tanto... Luego vinieron ellos, padre e hija, a pedirme una foto a mí. Dije algo así como »ay, sois maravillosos«. Por la noche mandé el video a algunos amigos y familia, pensé que sería precioso compartirlo por aquí y publiqué un storie pidiendo autorización. ¡Qué bonita es la gente! ¡Qué maravilla son las redes sociales para hacer el bien!. La gente compartió y esta mañana encontré a Nora, la niña de 13 años que patinaba con Arnau su hermano de 16 y su padre me dijo que sí, que podía compartirlo. Gracias Nora. La tarde del domingo yo aprendí mucho. Que viva Terrassa y su gente. La vida es muy bonita, sólo hay que saber mirar».

"La vida es muy bonita, sólo hay que saber mirar": la lección de bondad que ha hecho emocionarse a la actriz Toni Acosta

La actriz asistió emocionada a una escena en la que Nora, una niña de 13 años, patinaba en una pista de hielo con Arnau, su hermano de 16, que va en silla de ruedas

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