China continúa rebajando las restricciones COVID en las principales ciudades
Ya es necesario portar una prueba negativa de PCR para entrar en los establecimientos de las principales urbes del país
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Ciudadanos portan pancartas durante las protestas contra la estrategia 'COVID cero' que viene imponiendo el gobierno chino a su población / Abhishek Chinnappa
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Madrid
Los habitantes de las ciudades más grandes de China están viendo como las autoridades continúan relajando las restricciones contra el COVID después de las numerosas y multitudinarias protestas que se han sucedido en las últimas semanas en los barrios confinados de todo el país. En Pekín, Cantón, Shenzhen y Chongqing han decaído algunas medidas restrictivas como la necesidad de enseñar un resultado negativo de PCR para entrar en establecimientos. El sorprendente cambio de criterio llega después de que el gobierno chino anunciase que "se dan las condiciones para ajustar medidas", a la vez que han negado los rumores de una "apertura total".
En Cantón, donde continúa habiendo cifras de contagio que obligarían en el pasado a un confinamiento, han vuelto a abrir sus puertas restaurantes, centro comerciales y transporte público. Con ello, las pruebas PCR realizadas con una anterioridad mínima de 72 horas ya no son imprescindibles para ir al supermercado, al parque o a un comercio. Están empezando a desaparecer aquellas largas colas en las cabinas donde se realizaban las pruebas y que tanto descontento han generado entre la población china.
En los últimos días, ha sido muy comentado en redes sociales el gesto de funcionarios y portavoces del Ejecutivo chino que, antes de comenzar la rueda de prensa, se han despojado de las mascarillas. El hecho ha sido interpretado por la población como un símbolo de que su intención es continuar ajustando la político 'COVID cero' que hasta ahora venían imponiendo, como reacción gubernamental a las manifestaciones. La estrategia de salud nacional que hasta ahora China venía desarrollando para frenar el COVID se centraba en el aislamiento de todos los contagiados y sus contactos estrechos, estrictos controles fronterizos y confinamientos parciales o totales de lugares donde haya presencia de casos.
Se descarta el fin total de las medidas restrictivas
El Gobierno de Pekín ha descartado este sábado que se vaya a producir una "apertura total" y, con ello, el fin definitivo de las restricciones. Las autoridades han advertido de que la pandemia se encuentra todavía en "un nivel alto" y, por tanto, "no se puede tomar a la ligera" la situación sanitaria. La viceprimera ministra Sun Chunlan, responsable última de la estrategia "COVID cero", aseguró esta semana que la baja patogenicidad del virus y la alta tasa de vacunación de más del 90% de la población han "creado las condiciones" para que el país "ajuste las medidas contra la pandemia" al estar en "una nueva situación", con respecto a hace unas semanas.
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