El líder conservador de Suecia, Ulf Kristersson, recibe el encargo para formar Gobierno tras la victoria de la derecha en las elecciones

Madrid

El presidente del Parlamento de Suecia, Andreas Norlén, ha dado este lunes al líder del Partido Moderado, Ulf Kristersson, la orden de formar gobierno, ocho días después de que la suma de las derechas se impusieran en las elecciones a los socialdemócratas liderados por la primera ministra interina, Magdalena Andersson. La elección de Kristersson como encargado de formar nuevo gobierno en Suecia ha ocurrido tal y como estaba previsto. Norlén ha señalado en rueda de prensa que la decisión de escoger al líder del Partido Moderado ha sido " bastante sencilla".

"Como resultado de las rondas con los portavoces, le estoy dando al líder del Partido Moderado, Ulf Kristersson, la tarea de sondear las condiciones para formar un gobierno que pueda ser admitido por el Riksdag" --el Parlamento sueco--, ha anunciado Norlén tras mantener por separado consultas con los líderes de los ocho partidos representados en la Cámara. "Los partidos que representan la mayoría de los mandatos en el nuevo Riksdag han señalado a Ulf Kristersson como la persona adecuada y por tanto ha sido una decisión bastante sencilla de tomar", ha explicado el presidente del Parlamento.

Norlén ha informado de que no ha establecido ningún periodo exacto para que Kristersson finalice la tarea que se le ha encomendado, si bien ha señalado que "está claro hay una serie de problemas que deben resolverse y que necesitará de algún tiempo". A pesar de que el Partido Moderado cosechó sus peores resultados electorales de los último 20 años, la figura de Kristersson había surgido como la favorita para formar gobierno, un proceso con el que deberá ponerse de acuerdo con las otras tres formaciones de la derecha con las que logró superar a los socialdemócratas.

Por ello, el conservador será el encargado de dirigir las negociaciones políticas para intentar formar gobierno en Suecia tras el triunfo del bloque opositor de derecha en las elecciones legislativas del día 11. La derecha obtuvo 146 escaños frente a los 143 del centroizquierda de la primera ministra, la socialdemócrata Magdalena Andersson, que presentó su dimisión hace cuatro días, una vez que se estableció el resultado final tras el recuento del voto exterior y del voto anticipado que aún no había sido contabilizado.

Veto contra los ultraderechistas Demócratas de Suecia

El Partido Socialdemócrata fue el más votado con el 30,3%, por delante del ultraderechista Demócratas de Suecia (SD), con el 20,5%; y el Partido Moderado (conservador), con el 19,1%. El SD, con raíces neonazis en su fundación a finales de la década de 1980, ha sido sometido a un "cordón sanitario" por el resto de fuerzas desde su entrada en el Parlamento en 2010, lo que explica que los socialdemócratas hayan gobernado en minoría las dos pasadas legislaturas pese a que en la Cámara había mayoría de derecha.

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Conservadores, cristianodemócratas y liberales se abrieron sin embargo el último año a romper ese aislamiento y pactar con el SD, pero rechazan su entrada en un Ejecutivo, una exigencia que la ultraderecha parece aceptar a cambio de influencia política. Kristersson ha asegurado hoy que las conversaciones marchan "bien" pero que llevará "tiempo" cerrar un acuerdo, aunque no reveló si pretende gobernar en minoría con los democristianos, con apoyo externo del SD y los liberales, o incluir a las cuatro fuerzas en el Ejecutivo.

"Mi punto de partida sigue siendo que a Suecia le convendría un gobierno de mayoría", ha dicho el líder del SD, Jimmie Åkesson, matizando sin embargo que "lo más importante" para su partido es la política del nuevo ejecutivo y que no quiere "forzar" nada. El líder liberal, Johan Pehrson, ha reiterado por su parte que su partido no entrará en un gobierno en el que esté el SD.