Felipe VI, Biden, Von der Leyen...Londres se blinda para recibir a los mandatarios internacionales por el funeral de Isabel II

El Reino Unido recibe este domingo a los jefes de Estado y dignatarios mundiales que asistirán este lunes al funeral de la reina Isabel II, fallecida a los 96 años tras siete décadas en el trono. El rey Carlos III ejerce de anfitrión en una recepción en el palacio de Buckingham con los principales líderes desplazados a Londres que ha comenzado en torno a las 18:00 horas de Londres (las 19:00 horas de España peninsular). Los mandatarios y representantes de las delegaciones internacionales han accedido durante la jornada a la capilla ardiente de la soberana instalada en el palacio de Westminster, por la que han continuado pasando miles de personas hasta la mañana del lunes. Los reyes de España, Felipe VI y la reina Letizia, han sido de los primeros en llegar a la capilla ardiente esta tarde para despedirse de la soberana. Además, también han acudido al acto el rey emérito Juan Carlos I y doña Sofía, así como los miembros de las principales familias reales europeas: los reyes de Bélgica, los de Países Bajos, Noruega, Suecia, Dinamarca y Mónaco. También han asistido la primera ministra británica Liz Truss; el presidente de Estados Unidos Joe Biden; el de Francia, Emmanuel Macron y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. Asimismo, acudirán el presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier y el italiano, Sergio Mattarella. Los emperadores de Japón, Naruhito y Masako, partieron este sábado hacia el Reino Unido, en el que supone su primer viaje al extranjero desde que ascendieron al trono en 2019. China enviará a su vicepresidente Wang Qishan y se espera que esté en Londres para reunirse con Carlos III el príncipe heredero saudí, Mohamed Bin Salmán, aunque según Sky News no asistirá al servicio religioso. La primera ministra británica, Liz Truss, aprovechará la presencia de mandatarios mundiales para mantener entrevistas con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, el presidente de Polonia, Andrzej Duda, y el primer ministro irlandés, Micheál Martin. Macron y Biden también han acudido. La reunión que estaba prevista entre Truss y Biden ha sido cancelada, y ambos se encontrarán el miércoles en el marco de la Asamblea General de la ONU, en Nueva York. La capital británica ha sido, durante estos últimos días, una ciudad parcialmente paralizada en su zona centro por las colas masivas para entrar a la capilla ardiente. Miles de policías han vigilado el correcto desarrollo de una espera que, para algunas personas, ha supuesto estar prácticamente un día a la intemperie. La Policía Metropolitana tiene asumido que el funeral de Estado será «el mayor evento único» a nivel de fuerzas de seguridad que se haya celebrado nunca en Londres. El subcomisario de Scotland Yard, Stuart Cundy, ha reconocido que los desafíos a nivel operativo son «enormemente complejos», superiores a los de los festejos por el reciente Jubileo de Diamante de Isabel II o incluso de los Juegos Olímpicos de 2012. Las autoridades han instado a los ciudadanos a limitar sus movimientos este lunes, ya que varias estaciones de metro permanecerán cerradas. Asimismo, numerosas empresas han anunciado el cierre de tiendas y otros establecimientos, declarado día festivo por orden de Carlos III. También se han anunciado incidencias en el tráfico aéreo coincidiendo con el funeral, lo que ha provocado que solo en el aeropuerto de Heathrow, uno de los grandes aeródromos de Europa, se hayan cancelado más de un centenar de vuelos. Desde que se comenzó a preparar este dispositivo de seguridad, las autoridades británicas han pedido a los líderes internacionales que, en la medida de la posible, viajen en vuelos comerciales y que los traslados en Londres se harán mediante autobuses fletados por las propia Administración londinense. Esto se hace, además de para evitar congestionar el tráfico en la capital, para facilitar la movilidad y el acceso a Westminster, ya que entrarán por calles muy estrechas. Al principio, solo había un díscolo con el protocolo de Londres: el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha rechazado desde el principio esta idea y Biden ha asistido en «La Bestia», su coche oficial, blindado y con protección antimisiles. Tras Biden, han salido otros mandatarios a los que la idea de usar el autobús tampoco les ha gustado. Es el caso del emperador de Japón, Naruhito, y la emperatriz Masako, que también quieren utilizar sus propios medios de transporte. Y Macron, el presidente francés, que en principio tampoco tenía ninguna objeción al protocolo británico, ahora tampoco lo ve con buenos ojos. El presidente de Israel también rechaza la idea del autobús. Los reyes, Felipe y Letizia, que han viajado en un vuelo de la Fuerza Aérea Española acompañados por la reina Sofía y por el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, han llegado a primera hora de la tarde a Londres y visitado la capilla ardiente de la difunta monarca británica Isabel II instalada en Westminster Hall, el edificio más antiguo de la sede del Parlamento. Felipe VI y la Reina Letizia, ambos de riguroso luto, han permanecido poco más de un minuto en el interior de la sala en el que se encuentra el ataúd de la antigua monarca. Ambos han inclinado su cabeza en señal de respeto y Felipe se ha santiguado. Las autoridades británicas ya han advertido de que en las próximas horas se procederá a cerrar la cola, donde las horas de espera superan las diez, puesto que la capilla ardiente finalizará a las 6:00 horas. Don Felipe y doña Letizia se han dirigido a la residencia del embajador español en Reino Unido, José Pascual Marco, donde se alojarán esta noche. Aquí, han saludado a su llegada a un grupo de españoles que les esperaban. Por su parte, Sofía y Juan Carlos han llegado por separado a Londres y se ha dirigido a un hotel donde se alojará y en el que coincidirá con el rey Juan Carlos, que ha viajado desde Abu Dabi de forma privada. Desde Zarzuela no se ha indicado si los dos tienen previsto acudir a la capilla ardiente. Felipe y Letizia, junto con el rey emérito y la reina Sofía, participarán a las 18:00 horas de esta tarde en la recepción que ofrecerá Carlos III en el palacio de Buckingham a jefes de Estado y altos dignatarios que van a asistir al funeral, entre ellos el presidente estadounidense, Joe Biden. Mañana, los cuatro asistirán al funeral de la que fue monarca durante cuatro décadas en la Abadía de Westminster, si bien por protocolo no se espera que estén sentados juntos. El rey, como jefe de Estado, junto con Letizia, estarán ubicados en las primeras filas, mientras que Juan Carlos y Sofía no tendrán un lugar tan destacado. Casa Real ha dejado claro que nada tiene que ver con la organización del evento y el protocolo del mismo, que competen a las autoridades británicas. Por su parte, el Gobierno ha recalcado que la delegación española la encabeza Felipe VI, como jefe de Estado, mientras que el rey emérito acude por una invitación personal y no representa al Estado. Juan Carlos y Sofía no habían sido vistos en público juntos desde que se trasladó a Emiratos Árabes Unidos en agosto de 2020. Doña Sofía no ha viajado al país del Golfo para ver al antiguo monarca en este tiempo, como sí han hecho la infanta Elena y la infanta Sofía. Asimismo, desde hace dos años no existen imágenes del rey emérito junto a su hijo, aunque sí se vieron los dos en mayo en el palacio de la Zarzuela después de que el emérito regresara unos días a España para participar en unas regatas en la localidad gallega de Sanxenxo. El príncipe Mulay Rachid de Marruecos ha llegado este domingo a Londres para representar a su hermano, el rey Mohamed VI, en el funeral de Estado por Isabel II. Según ha informado la agencia marroquí oficial MAP en un comunicado, el hermano del monarca ha aterrizado este domingo en el aeropuerto Stansted, donde fue acogido por «un representante especial del rey Carlos III», así como por el embajador de Marruecos en Londres y su cónsul general. El presidente estadounidense, Joe Biden, ha visitado este domingo la capilla ardiente de la reina Isabel II y ha destacado que ha sido «un honor» conocer a la monarca, de quien ha dicho que le recordaba a su madre. Biden ha explicado, al ser interrogado por la razón por la que Isabel II le recordaba a su madre, que era «por cómo se inclinaba ligeramente, por cómo te miraba como diciendo ¿estás bien? ¿Puedo hacer algo por ti? ¿Qué necesitas? y después: Asegúrate de que haces lo que debes hacer». «A toda la gente de Inglaterra, toda la gente de Reino Unido: nuestro corazón está con vosotros. Sois afortunados por haberla tenido durante 70 años. Todos lo fuimos. El mundo es mejor gracias a ella. La prensa estadounidense me ha escuchado decir lo que pienso desde hace mucho tiempo. Puede que sea demasiado, si me disculpan la expresión por irlandesa: se trata de tratar a la gente con dignidad», ha añadido. Biden ha recordado así que tanto su madre como su padre «creían que todo el mundo, fueran quienes fueran, fuera cual fuera su situación, fueran de donde fuesen, se merecían ser tratados con dignidad. Y eso es exactamente lo que transmitía (la reina) conforme andaba, con sus actos». Biden se ha desplazado hasta la capital británica para asistir al funeral de Estado de la reina Isabel II, previsto para este lunes. La primera dama de los Estados Unidos, Jill Biden ha firmado un libro de condolencias para la reina Isabel II después de ver el ataúd de la difunta monarca británica en su funeral en Westminster Hall. Los Biden rindieron homenaje a la reina Isabel en la víspera de su funeral de Estado, apareciendo en un balcón con vista al ataúd de la difunta monarca de Gran Bretaña. Los Biden se encuentran entre las decenas de dignatarios y miembros de la realeza de toda Europa, Asia, África y las Américas que asistirán al funeral del lunes y el estadounidense se unirá a presidentes, primeros ministros, reyes, reinas y sultanes que representan a casi 200 países y territorios en el funeral. Joe Biden fue uno de los 14 presidentes de EE. UU. en el cargo durante su reinado de 70 años, de los cuales Elizabeth conoció a todos excepto a Lyndon Johnson, comenzando con Harry Truman en 1951 cuando aún era una princesa.

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Los reyes de España han visitado esta tarde la capilla ardiente de la difunta monarca en el Westminster Hall

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