Samantha Hudson: "Hablaba con Jesucristo porque era el único que no me decía: "Cállate, imbécil"'

Madrid

Uno de los escenarios que marcan la infancia de Samantha Hudson (León, 1999) son los pinares que había cerca de su colegio en Magaluf: "Como tenía muy pocas amigas, hablaba con los árboles y con Jesucristo porque nadie me entendía", explica de aquella época en la que creía en Dios porque «era el único que no me decía: "Cállate, imbécil"». La cantante ha estado hablando con Mara Torres sobre su relación con su familia, con quien se prometió estrechar lazos a raíz del fallecimiento de su abuelo: "Me propuse ser más tierna con mi familia, dejé de ser esa adolescente encerrada en sí misma".

La gataparda ha escogido como seudónimo 'Iván Vagina', el usuario que utilizó cuando entró por primera vez en redes sociales como Instagram o Snapchat: "Sentía que mi nombre, Iván González, no me definía para nada y me creé un personaje con el que me fui descubriendo". La carrera profesional de Samantha Hudson arranca cuando hizo un trabajo audiovisual llamado 'Maricón'. En esta canción, la artista hacía alusión al rechazo que sentía por parte de la Iglesia Católica por ser homosexual cuando era creyente. "La campaña de marketing me la hicieron la Iglesia Católica y los partidos de ultraderecha", explica sobre este episodio que generó tal revuelo que hasta el obispo de Mallorca la excomulgó.

Ahora, con 22 años, Samantha Hudson es uno de los grandes fenómenos pop de la actualidad. Con su primer álbum, 'Liquidación total', estará de gira hasta 2023 en ciudades como Burgos, Barcelona o Santander.

Al final de esta conversación, la cantante decide reencontrarse con sus abuelos mientras suena 'Luz de luna' de Chavela Vargas: "Estaría aferrada a ellos como un escarabajo a la sabia de un árbol".