El punto de vista de Pity Alarcón: 'A vueltas con los taxis'

Murcia

Que viajar a Murcia, desde Andalucía, es una auténtica odisea ya lo sabíamos, porque la conexión por tren no existe y solo nos queda lo de hacerlo en autobús. Un bus que puede tardar, si su viaje es desde Sevilla, pongamos por caso, la friolera de siete horas y media como mínimo. Vamos, toda una aventura.

Pero la aventura se convierte en insoportable si el viajecito de marras lo hace un fin de semana, porque a las horas de peregrinación, se junta su llegada a la estación de autobuses de Murcia y a la ausencia de taxis en la puerta. Porque sí, porque lo de los taxis en Murcia, los fines de semana, se ha convertido en toda una odisea.

Y si tras largo tiempo de espera tiene la fortuna de que venga un taxista comprensivo que entiende su desesperanza por lo de no encontrar taxi, la cosa puede ir medio bien. Pero si encima de esperar largo tiempo le aparece un taxista “pelín” prepotente y actitud chulesca que lo mejor que te dice es que los ciudadanos “si podemos esperar en las colas de los médicos pero no en la de los taxis” (les aseguro que justo dijo esto) ya el día se estropea irremediablemente.

Y digo yo, ¿el ayuntamiento no puede hacer nada para que esto no ocurra, para que los ciudadanos usuarios de taxis, en Murcia, no tengan que encomendarse, los fines de semana, a la Virgen de los Imposibles para encontrar ese servicio que necesita después de un largo e incomodo viaje, por ejemplo?

Y es que lo de los taxis, en Murcia, sábados y domingos, y fiestas de guardar, es un autentico problema que, al parecer, no preocupa a los que tendrían la obligación de ponerle remedio.

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Pity Alarcón