Felipe Moreno planea donar una acción a cada uno de los accionistas que no participen en la operación acordeón

Murcia

El Real Murcia ha incluido la operación acordeón en su Plan de Reestructuración. La operación acordeón está regulada en la Ley de Sociedades de Capital y no es necesaria para reducir la deuda privada del club, que se regula en el Texto Refundido de la Ley Concursal.

Una de las consecuencias de esta operación acordeón es que los 32.871 accionistas repartidos por todo el mundo que tiene el Real Murcia dejarán de serlo. Volverán a serlo los que vuelvan a comprar acciones en la ampliación de capital posterior a la amortización de las acciones actuales.

Una pérdida para el patrimonio del club que desde el Consejo de Administración no quieren perder. Por eso, Felipe Moreno planea donar una acción a cada uno de los actuales accionistas que no concurran a la ampliación de capital de la operación acordeón con el fin de mantener el patrimonio histórico del club que generó el movimiento social que salvó a la entidad grana de la desaparición.

Esta redacción se ha puesto en contacto con diferentes especialistas que aseguran que esta iniciativa es posible, pero que cada uno de los receptores de esas acciones tendrán que aceptar la recepción. Es decir, que de esos 32.871, los que no participen en la ampliación y reciban la donación, tendrán que aceptarla para que su nombre quede, de nuevo, escrito en el libro de socios del club.

"En toda donación es condición obligatoria la aceptación por parte del donatario (quien la recibe), así lo indica el Código Civil en sus artículo 630: «El donatario debe, so pena de nulidad, aceptar la donación por sí o por medio de persona autorizada con poder especial para el caso, o con poder general y bastante»", explican a Radio Murcia Cadena SER.

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