La competitividad del UCAM Murcia CB no es suficiente para frenar a Baskonia

Murcia

El UCAM Murcia CB recibió a Cazoo Baskonia en un Palacio abarrotado para homenajear a su presidente recientemente fallecido, José Luis Mendoza. Un duelo que comenzó con un equipo visitante manteniendo el pulso al ataque, pero con los universitarios aguantando las acometidas vitorianas.

Marinkovic y Enoch fueron los que se repartieron los puntos para los de Peñarroya y el perímetro estaba siendo una auténtica pesadilla para el equipo dirigido por Sito Alonso. Tuvo que pedir tiempo muerto el técnico de los murcianos para frenar la sangría. Ahí tuvo buenas manos Radovic para acercar posturas, también Davis y Travis (19-23).

En el inicio del 2Q salió el UCAM con dinamita, aunque Baskonia no quiso quedarse atrás. McFadden abrió el camino con un triple, pero los de Vitoria contestaban con otro. Fue una guerra sin cuartel de tres en tres que provocó que los guarismos se disparasen hasta que los locales se pusieron por delante.

Antes del descanso llegaron las fuerzas igualadas, con ambos quintetos equilibrados y con una mejora en la defensa del UCAM. Logró sobreponerse a las embestidas de Cazoo Baskonia, pero los visitantes supieron jugar sus cartas al rebote y en los tiros de campo para rematar la faena (36-41).

El protagonismo en el inicio del 3Q fue para los murcianos con Luther sacándose lanzamientos de tres. La calidad individual de Baskonia permitió a los de Peñarroya irse con casi 10 puntos arriba, sin embargo Trice estuvo en la pomada para mantener la vida más que nunca (56-63).

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En el último cuarto, con todo abierto, el UCAM se aferró más que nunca a la vida con el convencimiento de que podía llevarse el duelo si metía un punto más de intensidad. Lejos de amilanarse y sentirse intimidado por el equipo vitoriano, afrontó con máximas garantías los últimos minutos.

Para rematar la cita, cuando Baskonia pisó el acelerador, sufrió el equipo local, visiblemente desgastado en la parcela física. Con ataques intermitentes, los pupilos de Sito Alonso, empujados por el Palacio, remaron como pudieron hasta la orilla final pero sin el resultado deseado ante un rival muy superior (80-87).