El 40,6% de la infancia de la Región está en riesgo de pobreza y exclusión, el tercer porcentaje más alto por Comunidades
Un 13,7% de menores sufre pobreza energética, un 8% no puede adquirir un ordenador personal o casi el 5% no puede permitirse una comida de carne
Murcia
El 40,6% de la infancia de la Región de Murcia está en riesgo de pobreza y exclusión, el tercer porcentaje más alto por comunidades autónomas junto a Extremadura, solo inferior al de Canarias (47,4%) y Andalucía (43%), según ha puesto de manifiesto la Plataforma de Infancia este martes en la presentación de su análisis sobre la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) con enfoque de infancia 2022.
El riesgo de pobreza y exclusión social en España crece entre la población infantil tras la crisis de la Covid-19, situándose en un 33% de niños y adolescentes afectados, frente al 30% de 2019, mientras que el 28,9% vive en hogares con ingresos inferiores al umbral de pobreza, lo que supone 7,2 puntos porcentuales más que la media de la población (21,7%). Además, España es el segundo país de la UE con mayor tasa de niños y adolescentes en riesgo de pobreza y exclusión social, sólo por debajo de Rumanía.
Esta es la denuncia realizada por la Plataforma de Infancia este martes en la presentación de su análisis sobre la Encuesta de Condiciones de Vida con enfoque de infancia 2022, en la que han participado el director de la entidad, Ricardo Ibarra, y el autor del informe, Joffre López Oller.
Según este análisis, que recoge los datos de 2021, el impacto de la Covid-19 a nivel socioeconómico ha afectado sobre todo a la población infantil, especialmente en el caso de hogares con niños dependientes y de familias monoparentales.
En consecuencia, el número de menores con privaciones materiales también han aumentado, con un 19,3% de niños y adolescentes con carencia material y el 8,9% con carencia material severa --la mayoría niños menores de siete años--. Esto, ha advertido la Plataforma de Infancia en su análisis, deriva en privaciones de la familias con menores a la hora de sufragar el ocio o enfrentar otros gastos, lo que se refleja en que un 13,7% de menores sufre pobreza energética, un 8% no puede adquirir un ordenador personal o casi el 5% no puede permitirse una comida de carne, pollo o pescado al menos cada dos días. Además, la población infantil tiene una mayor presencia entre los grupos de ingresos más bajos.
Todo esto supone a lo largo del tiempo que estos niños "arrastren esta herencia" cuando sean adultos, continuando en la pobreza, ha lamentado López Oller.