Raquel Rey denuncia el acoso arbitral en El Larguero: “No voy a dejar de pitar”
Raquel, árbitra de tan solo 13 años, fue increpada y agredida verbalmente durante un partido de prebenjamines en A Coruña
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Raquel Rey en Riazor junto a Diego Villares y los árbitros del partido | Foto: RCDeportivo
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A Coruña
El fútbol base en España volvía a estar en el centro de la polémica la semana pasada por un lamentable episodio de acoso arbitral. Raquel Rey, árbitra de tan solo 13 años, fue increpada y agredida verbalmente durante un partido de prebenjamines en A Coruña. Una semana después de lo sucedido, la joven ha contado su experiencia en El Larguero de la Cadena SER.
Un acto de valentía en Riazor
El caso de Raquel cobró mayor dimensión tras el apoyo del Deportivo de La Coruña, que le brindó un emotivo reconocimiento antes del partido frente al Huesca en el estadio de Riazor. La joven se dirigió a un estadio repleto para leer un comunicado en el que condenó los actos de violencia verbal en el deporte base y envió un mensaje de valentía y perseverancia.
"Me hizo darme cuenta de que valgo mucho y de que no porque unos chicos me digan que no valgo para nada, tengo que dejar de ser árbitro y de hacer lo que me gusta", declaró Raquel en el programa dirigido por Manu Carreño.
Una historia de superación
En la entrevista, Raquel relató con serenidad cómo vivió los insultos y la presión del público durante el partido entre el Victoria y el Silva. Pese a que en el momento sintió miedo, aseguró que no se planteó abandonar su pasión: "Al día siguiente volvió a pitar otro partido de prebenjamines".
Iturralde González elogió su valentía y le dio un consejo para afrontar futuras situaciones similares: "Tú simplemente actúa como has actuado esta vez, con tranquilidad, hablando con el que tengas que hablar y sabiendo que estás haciendo lo que realmente te gusta".
La sanción y el impacto en el fútbol base
El episodio de acoso no quedó impune. El delegado del Victoria recibió una sanción de tres meses de inhabilitación, una decisión que Raquel valoró de forma positiva: "Siento que no puede haber personas así en un campo y menos si hay niños pequeños de por medio".
El caso de la joven ha reavivado el debate sobre la necesidad de erradicar la violencia en el fútbol formativo y ha servido como ejemplo de coraje y determinación. "Que no dejen de hacer lo que les gusta y que denuncien estas situaciones", fue el mensaje final de Raquel en El Larguero, un testimonio que ha calado hondo en la comunidad futbolística y más allá.