El Supremo ratifica la absolución del artista que pintó una paloma de la paz en la tumba de Franco
Los magistrados de la Sala de lo Penal adoptan esta decisión al desestimar el recurso que presentó la Asociación para la Defensa del Valle de los Caídos
A Coruña
El Tribunal Supremo ha confirmado la absolución del escultor coruñés Enrique Tenreiro que pintó una paloma de la paz en la tumba del dictador Francisco Franco en la Basílica del Valle de los Caídos el 31 de octubre de 2018. Los magistrados de la Sala de lo Penal adoptan esta decisión al desestimar el recurso que presentó la Asociación para la Defensa del Valle de los Caídos contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid que dictó la absolución de los delitos contra la libertad de conciencia y de profanación y daños en tumba.
Más información
En la sentencia el tribunal concluye que no puede afirmarse que la acción del acusado impidiera el ejercicio de la libertad religiosa de quienes pudieran asistir a la Basílica porque la mida aún no había comenzado y él "hizo expresión de sus ideas sobre la presencia de la tumba de Francisco Franco".
El hombre pintó sobre la tumba "y en color rojo una paloma de la paz con el texto 'por la libertad". Seguidamente, dijo en voz alta: "Por la reconciliación de los españoles" dentro de una "performance" en la víspera del día de difuntos.
En el juicio recordó que ni Benito Mussolini ni Adolf Hitler guardan sepultura en lugares públicos y que el féretro del dictador estaba "fuera de lugar" en un mausoleo "pagado por todos".
Este acto se produjo en medio del debate que se generó en la sociedad ante la exhumación de los restos del dictador, que finalmente fue trasladado en octubre de 2019 al cementerio de Mingorrubio, ubicado en El Pardo.
La Sala de lo Penal señala que no se deben modificar los hechos probados por el tribunal de instancia, lo que buscaba la entidad recurrente, que reclamaba una modificación fáctica para imputarle delitos contra la libertad de conciencia, los sentimientos religiosos y el respeto a los difuntos así como la vulneración de la libertad religiosa que protege la Constitución.
"Ni vemos en ese relato la concurrencia de presupuesto fáctico sobre el que definir cualquiera de los delitos por los que pretende condena el recurrente, ni nos lo aporta el discurso que este realiza", recoge el fallo.
Las primeras instancias ya le habían dado la razón al escultor al considerar que no constaba "el propósito o intención de lesionar la libertad de conciencia y los sentimientos religiosos" lo que se pone de manifiesto en el momento mismo de realizar la pintada, cuando alude a la libertad y la reconciliación de los españoles.
La Asociación para la Defensa del Valle de los Caídos había solicitado en el juicio dos años y medio de cárcel por profanar la tumba e interrumpir una misa.
El Supremo confirma que "no consta que la actuación del acusado afectara a la celebración de la misa, que no había comenzado" sino que la intención del coruñés era "hacer expresión de sus ideas sobre la presencia de la tumba de Francisco Franco en dicha Basílica", por lo que queda así confirmada la absolución del artista.
Tenreiro ha explicado que está "encantado" porque "se ha hecho justicia" en un caso en que ve "evidente" que no podía haber condena, pues se trataba solo de pintar una tumba, aunque "era una tumba especial, de un dictador".
Esta sentencia llega después de un acto reivindicativo del propio artista, quien en abril del año pasado se encerró en un escaparate de una tienda de arte de A Coruña vestido como un preso de Guantánamo para pedir agilidad judicial.