Broncón en el Parlamento por la comisión de investigación a la Xunta
El Bloque acusa al Partido Popular de no querer negociar el plan de trabajo, mientras que los conservadores denuncian las mentiras de los nacionalistas
NaN:NaN:NaN
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1730910894941/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Santiago de Compostela
Parecía otra sesión de control más y acabó en bronca importante entre el Partido Popular. Igual que había sucedido hace un par de semanas, de nuevo se volvió a desatar la tensión por el turno de palabra. En esta ocasión, con la comisión de investigación a la Xunta por los contratos bajo sospecha y el sobrecoste del Álvaro Cunqueiro como telón de fondo.
Y todo comenzó en el turno de pregunta de Ana Pontón, que le pidió a Rueda que rectificara por no aceptar un plan de trabajo distinto al que pone el Partido Popular encima de la mesa. "Si tuvieran la conciencia tranquila, no la boicotearían", espetó. Unas declaraciones que hizo después de trascender que el PP había convocado de forma urgente una reunión de la comisión para este viernes con el objetivo de cerrar el plan de trabajo.
En su respuesta, el presidente de la Xunta comentó que el proceso negociador seguía abierto y lamentó que el Bloque quiera seguir generando polémica por temor a que la comisión se vaya "desvaneciendo".
El asunto parecía quedar ahí, en el enésimo cruce de reproches entre Pontón y Rueda en una sesión de control. Pero entonces, intervino Alberto Pazos Couñago, portavoz parlamentario del Partido Popular, que apelando al artículo 76.1 reclamó la palabra ante las alusiones de Pontón. Pazos denunció que la nacionalista había faltado a la verdad: "O miente, o le mienten", aseveró, antes de indicar que seguían abiertos a alcanzar un acuerdo.
Pazos no hizo más alusiones directas que la de Pontón, aunque sí que hizo mención a una conversación telefónica con el nacionalista Luis Bará, y lamentó que el BNG tratarse de acelerar la comisión en público pero la torpedease en conversaciones privadas.
Quisieron defenderse los nacionalistas. Tanto Bará como Pontón pidieron la palabra, pero Miguel Santalices, el presidente del Parlamento, se negó a dársela, mientras escalaba la tensión con la bancada del BNG y con la vicepresidenta del Parlamento, la nacionalista Montse Prado. De hecho, la invitó a abandonar la mesa de la Cámara y ocupar su escaño como diputada.
"A juicio de la presidencia" decidió no darle la palabra antes de dar por concluido el debate, provocando la indignación entre los diputados del Bloque.
Quejas del BNG
Acto seguido, el Bloque citó a los medios a las puertas del Hemiciclo. Allí, Luis Bará avanzó que presentarán una queja formal al considerar "inédita" la decisión de Santalices. Consideran que este proceder es "consecuencia" de la bronca que tuvo hace dos semanas con Paula Prado, secretaria general del PP gallego.
Por eso, censuró que esté en el "redil popular" y que actúe "al dictado del PP". Además, afirmó que Pazos "faltó a la verdad" en su exposición de los hechos al término de la sesión de control sobre la conversación que mantuvieron la pasada semana.
El PP, abierto a negociar
También quiso aclarar lo sucedido ante los medios el Partido Popular. Pazos reiteró que está "abierto" a negociar hasta "ultimísima hora" y volvió a cargar contra el Bloque por su actitud ante la comisión con intención de "manipular".
Iñigo Caínzos
Redactor en Radio Galicia desde julio de 2021. Graduado en Administración y Dirección de Empresas y...