¿Tienen los perros síndrome postvacacional?

A Coruña

La vuelta a la rutina tras las vacaciones no solo es difícil para nosotros, sino también para nuestras mascotas. En la sección A cara de perro con Octavio Villazala, hemos explorado cómo estos cambios impactan en nuestros compañeros de cuatro patas y qué podemos hacer para facilitarles la transición.

Las mascotas son seres sociales y de costumbres

Villazala nos recuerda que perros, gatos, hámsteres, conejos y otros animales domésticos son seres sociales y, al igual que los humanos, necesitan rutinas para sentirse seguros y equilibrados. Durante las vacaciones, esas rutinas cambian drásticamente: "Las vacaciones son un periodo de ruptura, y ese cambio puede ser un trauma para ellos", explica.

Cuando estamos de vacaciones, solemos pasar más tiempo con nuestras mascotas, permitiéndoles más libertad, salidas al aire libre o juegos prolongados. Sin embargo, al volver a la rutina laboral o escolar, nuestros amigos peludos se enfrentan a una nueva realidad: menos tiempo con sus dueños, menos salidas y, a menudo, largas horas de soledad.

Signos de estrés post-vacacional en nuestras mascotas

Villazala menciona que muchos animales pueden experimentar una especie de "depresión post-vacacional". Los signos pueden incluir comportamientos inusuales como aullidos, dificultad para dormir, necesidad constante de atención, orinar o defecar con mayor frecuencia, o simplemente mostrar una actitud apática o deprimida.

“Los perros y gatos son animales de costumbres, y cualquier cambio brusco en su rutina puede generarles estrés”, asegura Villazala. “Notamos que están más inquietos, a veces incluso ‘deprimidos’, si son perros mayores, pueden mostrarse más apáticos, casi como si se sintieran perdidos sin la estructura de su día a día”.

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Estrategias para una transición suave

Para ayudar a nuestras mascotas a adaptarse mejor a la vuelta a la rutina, Villazala sugiere algunas estrategias efectivas:

• Guarderías urbanas para mascotas: Son una excelente opción para evitar que nuestros animales se queden solos durante muchas horas. "Las guarderías ofrecen la oportunidad de socializar y jugar con otros animales, lo que puede ayudar a reducir la ansiedad", afirma Villazala.
• Reintroducir la rutina de forma progresiva: Unos días antes de que finalicen las vacaciones, es aconsejable dejar que la mascota pase tiempo sola de forma gradual, aumentando el tiempo cada día. Esto ayuda a evitar el "hiperapego" y facilita la adaptación a la nueva rutina.
• Juegos y estimulación mental: Los ejercicios olfativos y los juegos en casa son esenciales. Ocultar pequeñas golosinas o juguetes en diferentes lugares de la casa puede mantener a los perros ocupados y mentalmente estimulados durante su tiempo solos.
• Evitar ambientes estresantes: "No es recomendable llevar a los perros a centros comerciales o lugares con mucho ruido; los ruidos fuertes y el bullicio pueden ser estresantes para ellos", explica Villazala. En su lugar, se deben buscar actividades que permitan a las mascotas disfrutar de la naturaleza, como paseos por el campo o senderismo.

Detectar el estrés y actuar con amor

Villazala insiste en que, al igual que nosotros, nuestras mascotas necesitan tiempo para adaptarse a los cambios. "Es importante notar las señales de que algo no anda bien: inquietud, cambios en los patrones de sueño, pérdida de apetito, y actuar con amor y paciencia", comenta.

En resumen, con cariño, atención y algunos ajustes en nuestra rutina, podemos ayudar a nuestras mascotas a sobrellevar el cambio de las vacaciones a la rutina diaria, asegurándonos de que su bienestar emocional sea una prioridad. Villazala nos anima a mantenernos atentos a sus necesidades y a recordar que, al igual que nosotros, ellos también necesitan tiempo para adaptarse.

Así que, mientras nosotros retomamos nuestras responsabilidades, recordemos que nuestras mascotas también están ajustándose a su propia vuelta a la rutina. ¡Muchos mimos, actividad y compañía son claves para hacer que este proceso sea lo más suave posible!