Los errores defensivos lastran al Celta en El Sadar
Derrota por 3-2 en un partido con alternativas y dos autogoles
![](https://cadenaser.com/resizer/v2/FGR6A2A2FMR4BPKW6DPRDBAX3M.jpg?auth=d8d58af33b6e72210deb9eed6c79881a888c006934628a00dd209df1769d2015&quality=70&width=650&height=487&smart=true)
PAMPLONA , 01/09/2024.- El defensa del Osasuna Jesús Areso (i), y el delantero del Celta Alfonso González en el partido de LaLiga entre Osasuna y Celta, este domingo en el estadio de El Sadar. EFE/ Jesús Diges / Jesus Diges (EFE)
![PAMPLONA , 01/09/2024.- El defensa del Osasuna Jesús Areso (i), y el delantero del Celta Alfonso González en el partido de LaLiga entre Osasuna y Celta, este domingo en el estadio de El Sadar. EFE/ Jesús Diges](https://cadenaser.com/resizer/v2/FGR6A2A2FMR4BPKW6DPRDBAX3M.jpg?auth=d8d58af33b6e72210deb9eed6c79881a888c006934628a00dd209df1769d2015)
Vigo
Cuando marcas dos goles fuera de casa y no puntúas es que has defendido muy mal. Cuando marcas tres y no puntúas, pues todavía peor. El Celta lleva una semana fuera de Vigo y se trae dos derrotas de Villarreal y Pamplona. La de La Cerámica llena de épica y con final trágico. La de hoy es un baño de realidad de que los rivales, con otros argumentos, también saben jugar su fútbol. Derrota dolorosa en El Sadar del Celta que, como dijo Aspas al acabar, no se encontró cómodo en el partido.
Había empezado muy valiente y mandón el Celta con varias llegadas de mucho peligro cimentadas en un Mingueza estelar y en un Panda que tiene el colmillo afilado. Una combinación de ambos acabó con un remate de Borja que sacó con la cara y fortuna Sergio Herrera. El Osasuna esperaba su momento y su ocasión para poder hacer daño al Celta y esta llegó a balón parado. Uno de los principales problemas de este Celta.
Si el otro día marcó el Villarreal su primer gol en un despiste de marca de Bamba, hoy fue Williot el que se relajó en la marca y permitió a Rubén García rematar solo dentro del área. El rechazo, tras dos despejes fallidos del Celta, lo marcó el central Boyomo.
Le tocaba remar otra vez a un Celta que era el que proponía y el que quería llegar en elaboración. El Osasuna activaba el modo ON del Vicentemorenismo para gestionar ese 1-0 a favor. Y no lo hizo nada mal.
Los de Giráldez lograban el empate en una escandalosa jugada de Mingueza, con autopase y caño incluido, para asistir a Borja que anotaba el gol del empate. El Celta volvía a meterse en el partido y era el minuto 28 de la primera parte. Después de aguantar muy bien y apenas pasar apuros, un fallo en la marca en banda permitió a Bryan Zaragoza sacar un centro limpio que Carlos Domínguez remató temerariamente hacia su propia portería. Gol en propia meta, el segundo de la temporada que encaja así el equipo celeste. Era un centro lateral con ventaja para el central. Lo peor de todo es que fue en el último minuto de la primera mitad. El Celta volvió a gestionar mal los últimos instantes. En esos en los que tienen que pasar pocas cosas y más si vas 1-1 fuera de casa.
En la segunda parte, Osasuna interpretó muy bien lo que tenía que hacer y lo que no. Arriesgar lo justo, juntar líneas, ordenarse y frenar con faltas tácticas cualquier amenaza de fútbol combinativo del Celta. Osasuna, que jugaba en casa, terminó el partido con 19 faltas. Eso sin contar en las que aplicó la ley de la ventaja el colegiado. Por eso decía Iago que el equipo no estuvo cómodo en El Sadar. Porque es lo que le puede esperar en muchas salidas al Celta ofensivo, valiente y atrevido de Claudio Giráldez. Sobre todo si va por detrás en el marcador.
Alfon lo intentó pero se topó con Sergio Herrera. Abel Bretones hizo una cabalgada sensacional que acabó en el 3-1 para Osasuna. Tres disparos entre los tres palos de Iván Villar y tres goles de los rojillos. Era el minuto 61 pero los celestes casi se rindieron.
Digo casi, porque ante un Celta con diez por la expulsión de Alfon, Osasuna se dedicaba a congelar el balón. Todo pudo cambiar cuando Moi Gómez, en propia meta, marcó un gol tan extraño como difícil de entender. Era el 3-2 y quedaba el añadido. Pero el Celta no inquietó a un Osasuna que sí supo jugar el añadido del primer tiempo y el añadido del segundo sin apenas sufrir.
El parón liguero vendrá bien a Giráldez para activar a Marcos Alonso, para meter en dinámica de grupo a Cervi, Allende y Luca de la Torre y para ver si Guaita y Ristic pueden acabar con su gafe de este principio de temporada.