Cae Francisco y resisten los Inmortales: Rafa Benítez y Aguirre
El Rayo destituye a su entrenador pese al colchón de 7 puntos con el descenso
El entrenador del Rayo Vallecano, Francisco, durante un partido ante la Real Sociedad / Juan Manuel Serrano Arce
Vigo
Contra vento e marea. Este es uno de los lemas recurrentes del Celta para insuflar ánimos en las tropas y en los aficionados en una temporada con tantos baches y con tantos malos momentos. El martes 13 ha servido para que cayese en combate otro técnico más de Primera División: Francisco en el Rayo Vallecano. Y eso que el conjunto madrileño todavía tiene un colchón nada desdeñable de 7 puntos con respecto al Cádiz y el descenso y, por ejemplo, cuatro de colchón con el Celta. La mala racha de solamente 1 victoria en los últimos 15 partidos ha obligado a la directiva rayista a buscar un revulsivo en el banquillo para enderezar no solamente los resultados sino también para levantar un vestuario muy tocado.
Rafa Benítez aguanta contra vento e marea, al igual que Javier Aguirre en el Mallorca. Ambos son un rara avis en esta Liga EA Sports en la que ya hubo bastantes movimientos en los banquillos de la zona roja, incluso Villarreal y Sevilla ya han realizado tres cambios. Benítez y Aguirre son como Christopher Lambert y Sean Connery en Los Inmortales. Ambos pertenecen al clan de los MacLeod que son Inmortales. Pero el lema de esa familia escocesa es “solo puede quedar uno”. Veremos lo que dirimen los resultados de Celta y Mallorca para ver si siguen permaneciendo los dos en sus respectivos banquillos.
El más madrugador fue el Villarreal que el 5 de septiembre se cargó a Quique Setién. Apenas tuvo tiempo para desarrollar un proyecto con muchos cambios provocado por las ventas importantes de jugadores. No se quedó ahí la cosa porque su sustituto, Pacheta, también se fue a la calle y se apostó muy fuerte por un caro Marcelino que había terminado su proyecto en Marsella.
El siguiente en tomar medidas fue el Almería que el 29 de septiembre se cargó a Vicente Moreno para intentar buscar un revulsivo. Llegó un Gaizka Garitano que no ha sido capaz de mejorar el rumbo de un equipo que no ha abandonado el farolillo rojo en todo el campeonato.
El tercer equipo en acabar con otro MacLeod fue el Sevilla. No había demasiada confianza en Mendilibar pero su triunfo en la Europa League y su clasificación europea le dio una bola extra. Después de Mendi llegó el uruguayo Diego Alonso que tampoco se adaptó a la exigencia del club de Nervión y también acabó siendo destituido y cambiado por Quique Sánchez Flores.
El 26 de noviembre caía Paco López en el Granada. Era la crónica de una destitución casi anunciada después del descarrilamiento en la Copa del Rey con la eliminación en Vilagarcía por alineación indebida contra el Arosa. Ahí quedó muy tocado Paco López y tampoco le acompañaron los resultados. Llegó el Cacique Medina que ha salvado ya un par de situaciones complejas.
El año empezó tenso en Cádiz que, tras verse superado por el Celta en la clasificación, empezaron los nervios en las altas esferas. Situación compleja hasta que el 20 de enero que el presidente Vizcaíno decidió cargarse a Sergio González, el técnico milagro de los últimos años. Llegó al proyecto cadista Pellegrino con experiencia ya en los banquillos de Valencia o Alavés.
La cosecha pudo haber sido peor porque, por ejemplo, Xavi Hernández decidió ponerse fecha de caducidad el 30 de junio antes de que lo destituyeran. Por ahora, también han aguantado respaldados Luis García en el Alavés o Jagoba Arrasate en Osasuna en los momentos de malas rachas o de resultados que les acercaron a la zona de descenso.
Pero Rafa Benítez (Lambert) ve como del clan MacLeod cada vez quedan menos a su alrededor. Aguirre (Connery) aguanta el duelo de espadas con el técnico madrileño para ver si pueden quedar dos, uno, como reza el lema del clan MacLeod, o ninguno.
