La Policía Local de Poio detiene a un conductor temerario tras una persecución de película por Monte Castrove
La Policía Local de Poio detiene a un conductor temerario tras una persecución de película por Monte Castrove
La Policía Local de Poio detuvo a un hombre de 36 años, natural de Barro, por un presunto delito de temeridad manifiesta con consciente desprecio por la vida de las personas.
Según la Policía Local puso poniendo en peligro a varios niños, adultos y jinetes en el lugar de la Escusa. Fue detenido, además, como presunto autor de delitos por influencia de alcohol y drogas en la conducción con resultado de accidente de circulación, y de atentado a los agentes de la autoridad de la Policía Local de Poio, así como otro presunto delito por negarse a realizar la prueba de drogas por efecto en la conducción.
Sobre las 16:30 horas del pasado domingo, 20 de agosto de 2023, los agentes de Policía Local que se dirigían a la Escusa, con motivo del operativo especial por ser el día de la Rapa das Bestas, observan un Renault Clio en la cuneta en sentido ascendente, dirección Escusa.
El conductor del vehículo denuncia que el conductor de un vehículo todoterreno de la marca BMW de color negro lo había sacado de la vía y se había dado a la fuga, manifestando éste que por la conducción supone que el conductor debía borracho o drogado.
Los agentes se dirigen en ese momento dirección a la Escusa con el fin de localizar al conductor fugado, pero se cruzan con el conductor fugado que conducía concretamente un BMW X5 de color negro y que circulaba en sentido ascendente y a gran velocidad siendo conducido por un hombre rubio de mediana edad. Según el relato policial, la persona que va a los mandos del vehículo es conocida por los agentes de la policía, tratándose de un conductor con antecedentes por hechos similares.
Los agentes le dan el alto, pero éste emprende la huida a gran velocidad en una zona de gran afluencia de personas y animales por motivo del día de la Rapa das Bestas.
Los agentes inician una persecución, pero el vehículo fugado circula a gran velocidad por la zona de fiesta, por caminos de tierra con un claro, con un claro desprecio hacia la vida de las personas, teniendo tanto peatones como jinetes que esquivar al vehículo para no ser arrollados por el mismo.
Los agentes siguen al temerario hasta un camino de tierra, realizando éste un cambio de sentido y dirigiendo su vehículo a gran velocidad hacia el lugar donde se encontraban los agentes, con idea clara de atentar contra ellos. La Policía Local evita ser embestida logrando esquivar por mínima distancia el vehículo del fugado.
Los agentes pierden la pista al conductor al meterse por pistas de tierra y piedras de difícil acceso donde era muy complicado circular con el vehículo policial, pero posteriormente se localiza al individuo en la zona de fiestas Rapa das Bestas, sin vehículo.
A la hora de practicar la detención y al darse cuenta de la presencia policial, el temerario emprende la huida a pie siendo interceptado y detenido por una patrulla de Policía Local.
Debido al grado de excitación y presumible consumo de drogas y alcohol, se solicita colaboración del 061 para la realización de valoración médica, pero el detenido se niega a recibir ningún tipo de asistencia sanitaria y amenaza con destrozar la ambulancia por lo que está abandona el lugar ante la reiterada negativa del detenido a ser examinado.
Se procede a realizarle la correspondiente prueba de alcoholemia arrojando una tasa de 0,64mg/l aire espirado y 0,60mg/l aire espirado respectivamente. Pero se niega a realizar la prueba de drogas alegando que había consumido cocaína, negándose el detenido hasta en tres ocasiones.
Debido al grado de alteración del detenido, éste es trasladado a los calabozos de la comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra con anterioridad a la finalización de las diligencias.
Hay videos grabados por testigos donde se observa de forma clara en dichas grabaciones que al sujeto le costaba mantener la verticalidad en el momento de dirigirse de nuevo a los mandos del vehículo del cual era responsable en el momento del altercado con el conductor accidentado en primer lugar. Además, profería amenazas y agresiones verbales a los presentes.
