Las administraciones toman medidas para ahorrar energía en invierno

Santiago de Compostela

El 2 de agosto el gobierno central publicaba en el BOE el Real-Decreto por el que se tomaban medidas de ahorro energético orientadas a rebajar el gasto en luz, calefacción y aire acondicionado. Esa normativa limitaba en edificios oficiales y lugares públicos la calefacción a 19 grados y el aire acondicionado a 27, con el objetivo de ahorrar hasta un 7% en el consumo.

A este Real-Decreto se le suman más medidas que han ido tomando universidades, ayuntamientos y centros escolares para ahorrar en sus facturas de la luz en ese invierno. Una de las primeras en hacerlo fue la Universidad de Santiago, que en septiembre aprobaba un paquete de medidas urgentes y un plan más ambicioso a largo plazo para conseguir reducir un 25% el consumo actual. A partir del 1 de octubre mantiene cerrados los edificios administrativos por la tarde y durante el periodo navideño cerrará toda la universidad. Además, han incorporado un sistema de apagado automático de los equipos informáticos en horario nocturno y han propuesto la reducción del alumbrado ambiental y ornamental, así como el control de la temperatura y la humedad. De cara al próximo curso reestructurarán los horarios para cerrar antes por las tardes. También la Universidad de Vigo, puso en marcha el 28 de septiembre un plan de medidas urgentes para el ahorro de entre un 25 y un 30% del consumo actual de energía y un plan de medidas estructurales de cara al próximo curso. Entre ellas, incluyen la gestión de la calefacción y la climatización de los edificios, la prohibición del uso de dispositivos individuales eléctricos, el apagado de equipos cuando no se usen y el ajuste de la iluminación interior y exterior. La más rezagada, la Universidad de A Coruña, que todavía no ha aprobado medidas, aunque se espera que lo hagan a finales de este mes de octubre.

Preocupación en los institutos

Los centros educativos se preparan para el invierno y lo hacen con los recursos que han previsto en marzo de este año, antes de la subida de los precios de la energía como consecuencia de la guerra en Ucrania. El portavoz de los centros de secundaria de Santiago asegura que es en marzo de cada año cuando prevén lo que van a gastar en estos conceptos y que ese presupuesto finaliza, no en diciembre, sino en el mes de marzo del año siguiente. Este invierno se muestran preocupados por el pago de la calefacción de los institutos y centros de FP. La Xunta de Galicia destinó en el año 2020 un total de 12 millones de euros a la compra centralizada de gasóleo, a precios más competitivos y durante dos años. Sin embargo, ese presupuesto se ha quedado corto según los directores de los centros. Piden que la Consellería de Educación incremente ese presupuesto que ya consideran "ajustado" y que además realice un plan integral de mejora de la eficiencia energética que incluya, por ejemplo, cambio de ventanas para así ahorrar más. La Xunta, por su parte, asegura que desde 2017 han invertido más de 117 millones de euros en obras de mejora de la eficiencia energética. Eso sí, desde los centros quieren tranquilizar a las familias. A pesar de que todo se ha incrementado, también los consumibles como los folios, desde las direcciones de los centros aseguran que, de recortar, no lo harán en el gasto en calefacción.

¿Qué medidas han tomado los concellos?

Casi todos han invertido en mejoras en su alumbrado público, por ejemplo, sustituyendo las bombillas tradicionales por luces LED o el cambio de calderas por otras de bajo consumo. Es el caso de Ferrol, Santiago o Lugo. En la ciudad amurallada calculan un ahorro de 300.000 euros anuales en la factura de la luz y otros 70.000 al sustituir los generadores eléctricos en 8 edificios por la instalación de biomasa. También en Vigo, donde han cambiado 14.000 bombillas y prevén otras 4.000 más, con las que esperan un ahorro del 70% anual en la factura. El presidente de la Federación Galega de Municipios e Provincias, Alberto Varela, agradece las medidas tomadas por los concellos y calcula que cada ayuntamiento se gastará entre 15.000 y 20.000 euros más al mes en luz. Alberto Varela no descarta reunir a los ayuntamientos gallegos y tomar más medidas si estas resultasen innecesarias. "Si esta energía no acaba de bajar todo lo esperado", asegura el presidente de la FEGAMP, "tendremos que volver a sentarnos para ver qué medidas tenemos que implementar a mayores para que no se coma buena parte del gasto corriente que impida dar otros servicios públicos que hay que prestar".