Así llegó el Pazo de Meirás a manos de Franco; así volvió al Estado

A Coruña

Hoy se celebra la vista judicial que determinará quién es el propietario de los bienes del Pazo de Meirás. Sucede un año después de la recuperación de las Torres por parte del Estado. El Puzzle reconstruye su historia.

¿Cuándo se levanta el pazo de Meirás y quién era su propietaria?

El Pazo o las Torres de Meirás empieza a construirse en el año 1893 por orden de Emilia Pardo Bazán, que había recibido en herencia el terreno y las ruinas de una fortificación sobre la que se levantó el inmueble.

Emilia Pardo Bazán pasaba varios meses allí. El resto del tiempo estaba en A Coruña o en Madrid. En la Torre de la Quimera la escritora instaló su biblioteca, en la que trabajaba.

Emilia Pardo Bazán murió en 1921. Su hija y la viuda de su hijo heredaron el pazo.

¿Cómo se hicieron los Franco con el inmueble?

El 3 de marzo de 1938 se constituye la denominada Junta pro Pazo del Caudillo, formada por el gobernador civil y varios alcaldes de la provincia. Su objetivo era conseguir un inmueble para donarlo al dictador, Francisco Franco.

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El dinero se consiguió a través de donativos forzosos, que sirvieron para la operación y para el acondicionamiento del inmueble. La compra del Pazo se realizó el 3 de agosto de 1938. Después, el 5 de diciembre, se entregó al entonces jefe del Estado. La hija de Emilia Parzo Bazán intentó recuperar sus pertenencias, pero le impidieron la entrada.

¿Cuál fue su uso durante la dictadura?

Durante la dictadura fue fundamentalmente la residencia de verano del dictador Francisco Franco y su familia.

¿En estos momentos quién es su propietario? ¿Existe una sentencia firme?

Hasta el momento hay dos sentencias judiciales que establece que el propietario del Pazo de Meirás es el Estado. Así lo señaló la resolución del juzgado de primera instancia número 1 de A Coruña, que aceptó la demanda presentada por el Estado. La sentencia fue después confirmada en lo fundamental por la Audiencia Provincial de A Coruña. Lo que dicen es que tanto la donación como la compra fue irregulares. Y que el propietario debe de ser el Estado porque lo gestionó durante toda la dictadura y porque era la residencia oficial de verano del Jefe del Estado. Eso sí, la familia Franco ha recurrido al Tribunal Supremo, así que la sentencia todavía no es firme.

¿En que consiste la vista judicial de esta semana?

La vista judicial de hoy está relacionada con los bienes muebles, es decir, con los objetos que están en el interior del Pazo de Meirás. De lo que se trata es de determinar cuál es el propietario de estos objetos, si el Estado o la familia Franco, e incluso quién es el propietario de cada objeto.

¿Se conoce qué objetos se guardan en su interior?

El juzgado de Primera Instancia número 1 de A Coruña ordenó la realización de un inventario de los objetos que tiene el Pazo. Se encargó a dos arquitectos, un arqueólogo y una historia del arte. Es una relación de 697 objetos en un inventario de 163 páginas, 1.021 fotografías y 80 archivos de vídeo. ¿Está todo? No. Los autores del estudio no abrieron armarios y cajones, y no tuvieron en cuenta objetos personales de uso cotidiano. Tampoco desempaquetaron alfombras y tapices que pueden tener un alto valor.

¿Existe otra forma de proteger los objetos?

Sí, a través de su declaración como Bien de Interés Cultural, como se hizo en su momento con el propio Pazo. Es una competencia de la Xunta. Esta declaración no afecta a la propiedad de los bienes, pero sí establece mecanismos de protección. En este sentido, se podría ampliar el Bien de Interés Cultural a los objetos.

¿El Pazo se puede visitar en estos momentos?

Sí, se puede visitar, pero hay un recorrido establecido que no permite el acceso a todas las estancias. Recibe al mes alrededor de mil visitantes, que pueden ver estancias de la planta baja y los jardines. Pero no pueden entrar, por ejemplo, en las Torres. Allí está, oculta, la silla en la que escribía Emilia Pardo Bazán.