Plasencia

En un fin de semana marcado por la jornada de Copa del Rey en todo el país, la Copa Extremadura sigue su curso dejando las primeras sorpresas en la 2ª ronda celebrada el pasado fin de semana. Hasta 32 partidos se celebraron en la jornada dominical en la cual dejó luces y sombras en Plasencia. Por partida doble hubo fútbol en el Francisco Gil Valle, ya que se hubo que sortear el orden de los partidos que iban a disputarse en el feudo placentino.

Cruz para el Ciudad

El Ciudad de Plasencia jugó en primer lugar, a las 11:00 de la mañana y la matinal no pudo ir peor para el equipo magenta. Con la moral por las nubes con su flamante liderato en la primera extremeña, el Ciudad de Plasencia partía como favorito para eliminar al Nuevo Cáceres, 3º en la segunda extremeña, que acabó dando la campanada eliminando a los magentas por la mínima, 0 a 1 para los cacereños. Tras una primera parte sin goles en el marcador, la fortuna sonreiría al Nuevo Cáceres abriendo el marcador en el minuto 71 de partido. El Ciudad de Plasencia tuvo el empate en las botas de Castelani con un penalti en el minuto 79, pero el jugador magenta lo fallaría dando alas al equipo de la capital. El partido acabaría con el marcador definitivo de 0-1 y el Ciudad de Plasencia eliminado de la Copa de Extremadura.

Cara para la UP Plasencia

La tarde sería para el Plasencia, que en una situación deportiva muy delicada llegó a su compromiso copero sin entrenador anunciado de manera oficial y con dos caras nuevas que, de momento, caen de pie en la escuadra blanquinegra. Victoria balsámica para los placentinos que solventaron la eliminatoria sin dar opción alguna a sus rivales, Las Hurdes de Pinofranqueado, que ya en el minuto 30 de partido recibiría el primer gol por parte de Owen Udoh, nuevo fichaje de invierno del Plasencia. Nueve minutos después, en el 39, Oliva transformaría un penalti claro colocando el balón a la derecha de la portería hurdana ajustando al palo. Con el 2-0 en el marcador, los jugadores se fueron al vestuario. Mientras tanto, en el banquillo placentino se encontraban dos caras nuevas bastante bien conocidas. Sin que el Plasencia lo haya anunciado todavía de manera oficial, José Manuel Martín y David Salvo se sentaron a dirigir al equipo con el desconocimiento de la afición unionista de si este movimiento en el banquillo es definitivo. José Manuel, miembro del antiguo staff técnico de Carlos Baños, era el que daba las órdenes desde la banda, mientras que por otro lado David Salvo, actual director deportivo del club, estuvo sentado durante todo el partido en el banquillo unionista acompañando a Martín. Un club que sigue guardando silencio siendo ya varias las situaciones de falta de comunicación hacia su afición y los medios de comunicación.