"Para ti, un poquito de mí" : una mirada íntima al duelo gestacional
Alma Martín relata sus vivencias después de perder a su bebé en una obra principalmente escrita para su desahogo personal
Hora Extra - Para ti un poquito de mi
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Bilbao
El duelo gestacional es una realidad que, aunque profundamente dolorosa, a menudo es invisibilizada y desautorizada. Alma Martín, en su libro Para ti, un poquito de mí, explora esta experiencia con honestidad y vulnerabilidad, compartiendo cómo la pérdida de su bebé marcó su vida y la de su familia. A través de sus palabras, Alma da voz a un duelo que muchos enfrentan en soledad y nos invita a reflexionar sobre la importancia de reconocer y validar este tipo de pérdida.
"Creo que es un duelo muy invisibilizado y a veces un poco desautorizado también", explica Alma. La autora describe cómo, ante la pérdida, se encuentra una narrativa social que minimiza el dolor. "Es algo común, ¿no? La frase de ‘bueno, mujer, tampoco pasa nada si no tienes hijos’, o ‘ya tienes otros hijos’", reconocía. "Estas palabras reflejan una sociedad que no siempre reconoce la legitimidad de este sufrimiento, llevándola a sentir que no estaba autorizada para sentir dolor. "Es mi duelo. Era mi hijo. Es mi hijo, en presente", exclama.
El libro también aborda el proceso previo a la pérdida: la esperanza, la ilusión y la incertidumbre que acompañan la búsqueda de un hijo. "No piensas que no va a ser fácil, parece que oye, pues es ponerse y ya está. Pero a veces no. Y entonces pasa un mes, pasa otro, y piensas que sí, pero no, y empieza el miedo: ¿y si no llega nunca?", confiesa Alma, poniendo palabras al temor que acompaña a quienes enfrentan dificultades para concebir.
Uno de los aspectos más conmovedores de la obra es cómo Alma vivió su duelo en conjunto con su familia. Sus dos hijos mayores, de 8 y 10 años en ese momento, compartieron la ilusión del embarazo. "Fue muy bonito compartirlo, cada uno lo vivió de una manera. Los meses los disfrutaron muchísimo", recuerda. Sin embargo, la pérdida marcó un cambio profundo: "Desde el minuto uno, desde que volví del hospital, fue quizás el primer cambio en mi vida, porque yo no he sido nunca una persona de mostrar a mis hijos mi vulnerabilidad. Pero era tal el dolor que era imposible".
Esa vulnerabilidad dio paso a un aprendizaje mutuo. Alma destaca la sorprendente capacidad de sus hijos para enfrentar el duelo y cómo cada uno lo integró a su manera. "Para mí fue una lección cómo lo llevaron. Y a día de hoy lo han integrado perfectamente", explica. Alma narra con sensibilidad el sentimiento de culpa que su hija mayor expresó al perder al bebé, y cómo afrontaron juntos esas emociones.
En el libro, Martín reflexiona sobre el papel de su pareja en el proceso de duelo. Reconoce que la vivencia de cada uno fue diferente y se dio cuenta de que durante su proceso de escritura, ella se encontraba enfadada con el padre del hijo. "No tuve ese sentimiento ni esa emoción hasta que lo leí con él", desvela.
El duelo gestacional, como otros tipos de pérdida, se enfrenta a la incomprensión social. "Vas al médico y dices que no puedes trabajar porque estás en duelo, no solo por cuestiones físicas, sino emocionales. Yo no tenía depresión ni ansiedad, estaba en duelo", reconoce. "Parece que si en un par de meses no estás bien, entonces estás fallando", analiza Alma.
Esta presión social también se traduce en un cuestionamiento interno. "¿Cómo voy a decir que estoy sufriendo tanto? No es comparable a perder a una hija de 10 años. Pero luego ya te das cuenta de que no, que mi duelo vale tanto como el de cualquier otra persona". Con este libro, Alma no solo hace un homenaje al hijo que no llegó a nacer, sino también un llamado a la empatía y al respeto hacia quienes enfrentan la ausencia de quienes apenas comenzaron a existir.