El alcalde Juan Mari Aburto acude a la tradicional misa en honor a San Roque en Artxanda, que precede al inicio de Aste Nagusia
Esta celebración religiosa se celebra en las dos ermitas en honor a San Roque ubicadas en los montes Pagasarri y Artxanda, y año tras año, el Alcalde alterna su presencia en cada una de ellas
San Roque
Los alcaldes de Bilbao, Juan María Aburto, y Sondika, Naia Landa, han asistido este viernes a la tradicional misa en honor a San Roque en la ermita situada en el monte Artxanda, un acto que precede al inicio de las fiestas de Aste Nagusia de la capital vizcaína este sábado.
Según han explicado desde el Ayuntamiento de Bilbao, esta celebración religiosa se realiza en las dos ermitas en honor a San Roque ubicadas en los montes Pagasarri y Artxanda, y cada año el alcalde alterna su presencia en cada una de ellas. En esta ocasión, Aburto, acompañado de Naia Landa y varios representantes de la Corporación Municipal, ha participado este mediodía en la tradicional misa en honor a San Roque en la ermita del monte Artxanda.
Siglo XVIII
Aunque no hay constancia de su fecha exacta de construcción, se supone que la ermita de San Roque en Artxanda fue edificada en el siglo XVIII. Por su cercanía al límite entre Sondika y la antigua Anteiglesia de Begoña, ha sido punto de peregrinaje habitual para la feligresía de ambos municipios, cuyas autoridades solían intercambiar un saludo ceremonial cuando acudían a festejar el día de San Roque, según ha relatado el Consistorio bilbaíno.
Tras "los destrozos" sufridos en la Guerra del 36, fue reconstruida posteriormente "de forma sencilla" y, en noviembre de 1981, se llevó a cabo una reforma integral del edificio, que le dio su aspecto actual. San Roque, nacido en Montpellier (Francia) hacia el año 1300, el mismo año de la fundación de Bilbao, y es considerado el patrono de los perros y de las personas enfermas en la tradición cristiana.
El Consistorio bilbaíno ha señalado que, en 1575, con motivo de una grave epidemia de cólera que azotaba Bizkaia y "causó estragos" en la Anteiglesia de Abando, su ayuntamiento "hizo voto solemne de erigir una ermita en Pagasarri bajo la advocación de San Roque y trasladarse en procesión todos los años a dicho lugar si la epidemia cesaba". La ermita de San Roque en Pagasarri fue conocida también como 'San Roque el francés', ya que era albergue de los peregrinos que pasaban por este atajo camino de Santiago de Compostela.
