El municipio de Galdames pone en tratamiento a su emblemática encina para frenar su debilitamiento
Por petición de los vecinos, el Ayuntamiento de Galdames, ha realizado un estudio donde los resultados reflejan que hay tratar al árbol con un tratamiento de endoterapia vegetal
Encina de San Esteban / ENKARTERRIALDE
Bilbao
La encina que hay en el barrio de San Esteban de Galdames podría tener más de 200 años. En este sentido, los vecinos de la zona llevan tiempo preocupados por su estado de salud. Tras un estudio sobre la situación de la emblemática encina de San Esteban, el Ayuntamiento de Galdames ha decidido llevar a cabo un tratamiento de endoterapia vegetal para frenar el debilitamiento de este árbol tan significativo para el municipio.
"Hay que apostar por cuidar lo que tenemos. En este caso es un árbol, pero supone algo muy importante para el municipio y para los vecinos y vecinas. Hemos creído oportuno actuar antes de que sea tarde. Vamos a inyectarle un tratamiento", explica Nagore Orella, concejala de cultura y fiestas, comunicación, memoria histórica y barrios.
Tratamiento
La empresa Biosec ha sido la encargada de hacer una valoración tras comprobar que este árbol está sufriendo en general en nuestro entorno, un debilitamiento significativo por varias razones como la ausencia de sistemas de fertirrigación, el cambio climático y la alternancia de periodos de sequía o el desequilibrio químico del suelo. "Hemos hecho una analítica previa del sustrato y de la fisiología del árbol. Pretendemos que mediante endoterapia podamos aportarle una serie de nutrientes al árbol. Lo haremos a través de una serie de inyecciones", argumenta Imanol Castro, trabajador de la empresa Biosec.
El Ayuntamiento de Galdames ya ha iniciado su recuperación, incidiendo en activar las defensas, fortalecer las raíces y potenciar la producción mediante dos actuaciones. Se trata de 12 inyecciones a diferentes alturas y en el perímetro del tronco. También se le aplicará un tratamiento del suelo con cuatro intervenciones durante este año y una revisión cada tres meses. Castro explica que los resultados tendrán que esperar "aproximadamente un año" y una vez finalizado el tratamiento se valorará, en función de su efectividad, continuar con el mismo.
