El Ayuntamiento de Gorliz ha cerrado, por seguridad, el puente del paseo de la playa ante el mal estado de esta infraestructura, según ha dado a conocer hoy el Consistorio. La erosión originada por la arena y el salitre ha provocado que la madera de esta estructura se haya podrido, lo que pone en riesgo la seguridad de los viandantes. Como consecuencia, el Ayuntamiento ha cerrado el paso y ha abierto un camino para el tránsito de peatones que discurre de forma paralela al puente. Además, responsables locales tratarán de consensuar con la dirección de Costas y el departamento de Medio Ambiente del Gobierno vasco un proyecto que permita renovar el actual puente. La estructura discurre sobre una duna en la que habitan especies protegidas, por lo que no se puede mover la arena para llevar a cabo las obras de reparación