Álex Reyes: "Hay que seguir estirando el chicle"
El alero de Bilbao Basket cree que Bilbao Basket puede romper su racha a domicilio este domingo en Murcia
Álex Reyes celebra una canasta en Miribilla / Aitor Arrizabalaga
El último minuto del partido que enfrentó a Bilbao Basket y Breogán el pasado miércoles fue una locura. Al parecer, nadie en Breogán echó bien las cuentas y pensaron que el basketaverage lo tenían ganado. En realidad, lo tuvieron en su mano, pero incomprensiblemente lo echaron por la borda cuando fallaron a propósito uno de los tiros libres a quince segundos del final. Un auténtico lío. La cuestión es que con ese +17 para Surne, el equipo bilbaíno le levantó el basketaverage a Breogán. Un rival menos para esa lucha por la 10ª plaza del campeonato. Esa posición evitaría, al que la consiga, jugar la previa de la Champions. Ese es el objetivo para Bilbao Basket antes de su visita a Murcia el próximo domingo.
El basketaverage a favor se consiguió definitivamente con los dos tiros libres que metió Álex Reyes. El alero extremeño no pudo encontrar mejor manera de celebrar su partido número 100 en ACB. Hace tiempo que Álex Reyes dejó de escuchar la cantinela esa de ‘hijo de Miguel Ángel’, aquel gran jugador que pasó por Valladolid, Cáceres y Baskonia, entre otros equipos. El alero del Surne Bilbao Basket ha alcanzado los cien compromisos en la ACB con unos promedios de 5,4 puntos, 2,3 rebotes, 0,4 asistencias, 0,5 recuperaciones y 4,3 de valoración por partido.
“Van pasando los años. El otro día vi el grafico ese de los cien partidos: ojalá sean los primeros de otros tantos. Yo sí me veo ya como un jugador reconocido en la élite. La primera temporada se me hizo complicada, con una difícil adaptación por el cambio a una nueva liga, el COVID, el toque de queda y no poder salir de casa... A día de hoy soy un jugador asentado en la ACB, totalmente diferente al que llegó aquí hace tres temporadas y confío que vengan muchos más partidos”, apunta Reyes.
Un final bonito
Quedan dos jornadas, tres para el Valencia, y la pelea no ha terminado. El final de la fase regular se presenta tan insospechado que una derrota te puede mandar a la 12ª plaza, lo mismo que una victoria te puede llevar a soñar con los play offs. Y los 'hombres de negro' van a exprimir las remotas opciones que aún les quedan. Además de esperar los tropiezos del Valencia Basket (tienen una cita ante el Fuenlabrada y lo normal es que ahí zanjen el debate), el equipo de Ponsarnau debe ganar sus partidos frente al UCAM Murcia, a domicilio, y Unicaja en Miribilla. “Es complicado, pero hay que pelearlo. El objetivo inmediato es la décima plaza para evitar la previa de Champions, pero no vamos a dejar de lado la octava. ¿Por qué no vamos a sacarlo? ¿Quién nos dice que sacamos los dos partidos y se le complica a Valencia? Puede ser un final bonito", desea el alero extremeño.
Última oportunidad
Surne no gana a domicilio desde diciembre y Murcia es la última oportunidad que tiene esta campaña de arreglar esa estadística. Acumulan diez derrotas consecutivas en ACB y tres en la Champions. “Además de ser una noticia fantástica para la clasificación nos haría revertir la imagen como visitantes. Es un debe de este final de temporada. Fuera de casa no tenemos buenas sensaciones, pero lo último que debemos hacer es pensar en haber perdido tantos partidos fuera. Sería una actitud derrotista y así estamos más lejos de ganar. Vamos a Murcia con todas las ganas y al final veremos qué ocurre”, apunta Reyes.
Además de los resultados, el alero extremeño dio también importancia a acabar la Liga con la mejor imagen posible. "En una temporada con muchos altibajos, lesiones y momentos muy buenos y muy malos. A los equipos más humildes, con plantillas más cortas que las de los ocho primeros, se nos puede hacer más cuesta arriba el final, pero hay que estirar el chicle y dar lo que podamos. Contra Breogán dimos esa imagen de equipo aguerrido y que presenta pelea cada día", finalizó.
