Ariznabarra Berpiztu quiere devolver la vida a las calles del barrio

Ariznabarra es uno de los barrios de oro de la ciudad. Un barrio que ha ido creciendo a lo largo de los años, expandiéndose y cambiando con los tiempos y la llegada de las nuevas generaciones. Cambio de estilo de vida y costumbres, ya que «antes se hacía la vida en la calle y todos nos conocíamos», recordaba Luis Argote, con más de 60 años viviendo en Ariznabarra. A pesar de los cambios y la falta de relevo generacional en algunos de los comercios, Dani Lourido, dueño del bar Legend ha remarcado que «es un barrio en el que la gente vive muy unida, y se puede ver el buen ambiente entre generaciones», y Luis Argote apuntaba un claro «este barrio es la leche». La asociación Ariznabarra Berpiztu nace de la unión de 3 cuadrillas de jóvenes con el objetivo de «llegar a todas las personas del barrio, y para ello estamos tejiendo comunidad con la red Ariznabarra para trabajar todos juntos y ser más fuertes», ha indicado Jon Carreras, miembro de Berpiztu. Además, esperan «devolver la vida a las calles porque lo vemos un poco muerto y sin actividades». Un barrio que cada vez está atrayendo «más gente joven a sus calles con ganas de hacer cosas», coincidían en apuntar Jaione Saenz de Urturi, miembro de la asociación Ariznabarra Berpiztu y María Vázquez, dueña de la farmacia del barrio. Son muchas las anécdotas que se han ido dando a lo largo de toda la historia de Ariznabarra. Luis Argote nos ha contado en los micrófonos de SER Vitoria un par de estas que han ido pasando de generación en generación y forman parte de cómo se vivía en el barrio. «20 parejas se juntaron y casaron el mismo día, en lo que fue un día de fiesta para Ariznabarra», además a cada una «se le dio un piso en el barrio para que pudieran hacer la vida», ha explicado Argote que también recuerda como «la leona de La Puri se paseaba de la tienda al bar Mendizorroza y era mascota del club de fútbol». Ariznabarra Berpiztu ya está dando pasos adelante en post de revitalizar el barrio, creando fiestas, actividades y eventos como el que celebraron el pasado 26 de noviembre, para «seguir tejiendo contacto social», con una gran participación, ha indicado Jaione. Una primera fiesta que va a llevar a muchos más actos como el de este próximo sábado, 28 de enero, en el Gaztetxe porque «es un espacio que nos permite recaudar fondos y crear redes con otros barrios, ya que el Gaztetxe es un buen altavoz para crear esas relaciones y que conozcan el proyecto de Ariznabarra Berpiztu», ha explicado Jaione. Una fiesta popular con actos desde las 12:00 de la mañana con un vermuteo hasta las 2:00 con música y buen ambiente. Ariznabarra lleva ya varios años sin poder celebrar sus fiestas, concretamente desde el 2015, cuando sus vecinos y vecinas pudieron vivir las fiestas de este histórico barrio gasteiztarra por última vez. Parece que ese parón festivo terminará este septiembre de 2023, ya que Jon Carreras de Ariznabarra Berpiztu ha indicado que «el 6,7 y 8 de septiembre, en principio, son las fechas que manejamos para las fiestas de Ariznabarra, que este año se van a celebrar seguro». «Volver a crear las fiestas del barrio va a ser el punto de partido, pero nuestra idea es hacer diferentes actividades a lo largo del año para ser todos de nuevo una gran familia», ha remarcado Jon. Una iniciativa esperada y muy bien acogida por todos y todas la vecinas del barrio, «pero hay que hacer otras para mover económicamente el barrio, ya que falta ese relevo generacional en los comercios para que se abran más», ha remarcado María, dueña de la farmacia.

Ariznabarra Berpiztu quiere devolver la vida a las calles del barrio

La nueva asociación vecinal va a celebrar una fiesta este sábado en el Gaztetxe y quiere organizar las fiestas de Ariznabarra en septiembre

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