Rouselle: "Bilbao Basket tiene cosas que no tienen otros clubes"
El excapitan se marcha tras tres años involucrado en el proyecto


Al contrario de lo que suele ser una rueda de prensa para anunciar un adiós, Rouselle se lo ha tomado de manera menos triste. “Vamos a anunciar algo que va a causar una gran sorpresa" ha dicho entre risas para romper el hielo en la sala de prensa del Bilbao Arena. "Es el momento de dejar Bilbao, tengo 32 años y tengo que pensar en mis hijos. Es el momento de volver a Francia, aunque mi mujer no quería irse", añadía.
Rouselle se va de un club que tiene cosas diferentes a otros. "No soy una estrella, pero hacemos una rueda de prensa para despedirme, eso dice mucho de este club. La cercanía de todos los miembros del club y la manera de tratar a la gente, la afición, eso no existe en otros clubes", se enternece, aunque durante la ceremonia no ha caído ni una lágrima.
"Han sido tres años inolvidables para mí y para mi mujer y mis dos hijos. Es difícil poner en palabras lo que ha pasado. Al inicio, el objetivo era jugar mejor que mis dos hermanos mayores. Esto lo he conseguido. Luego quería llevar mi baloncesto a un buen nivel, también puedo decir que lo he logrado, y ser profesional en Francia. Era un sueño. Lo que casi no me puedo creer es que he podido competir fuera de mi país, encima en la ACB. No sé cómo ha pasado, pero estoy aquí despidiéndome después de tres años, es algo real. Es una suerte haber vivido esta experiencia, este viaje”, ha dicho.
La presidenta Iturbe ha sido concisa en su adiós: “Jou siempre será uno de los nuestros, uno de los dos capitanes, un ejemplo de valores, desde el primer día se integró perfectamente. Hay que destacar su cercanía con la afición y su compañerismo. Deportivamente ha sido una pieza clave y principalmente hay que agradecer su compromiso”.
El director deportivo, Rafa Pueyo, ha querido participar en la despedida: “Se va un ‘hombre de negro’ con mayúsculas, un buen jugador, y un excelente compañero y persona. Siempre ha pensado en el colectivo antes que en sí mismo. Es un día triste porque se va alguien muy querido, será el mejor embajador que tengamos en Francia del Bilbao Basket, mucha suerte en el Dijon”. le desea.
Se va un Rouselle diferente al que llego, tras 84 partidos en la ACB y 627 puntos anotados, con ese peculiar estilo de tiro. ”Hablo castellano, alcanzas la mejor liga de Europa, sales de tu zona de confort, me voy siendo mejor persona y mejor padre”, afirma.
Lo que ha dejado claro es que no se dio ninguna opción de una posible continuidad. "Estaba claro que esto era un fin de ciclo; y con la marcha de Álex, más. No ha sido mi mejor temporada. Es ley de vida y del deporte. Si no estás a tu mejor nivel... El club tiene que contar con los mejores jugadores”, dice con absoluta honestidad.
El base francés ha finalizado su acto de despedida con un repaso a estas tres temporadas, en las que ha habido de todo, desde una Copa, un play off y una salvación in extremis. “Hemos estado a una bandeja de acabar octavos. Mi mejor recuerdo es cuando nos metidos en la Copa por el escenario y el rival. Fue increíble. Me acuerdo de todo perfectamente. No tengo dudas que el momento peor fue el de mi lesión, al final del curso pasado cuando el club se jugaba la vida. Era la primera de mi carrera, es muy duro para un jugador no poder ayudar a los compañeros”. añade.
Rouselle se va con un mensaje claro hacia la afición. “El club está en buenas manos. No tengo miedo. Saben cómo hacer las cosas con poco dinero. Ahora es un momento clave, pero confío en el club al cien por cien”, afirma en su adiós.