El CEGMA de Algeciras custodia una tortuga marina rescatada frente a Doñana
Se trata de una tortuga boba que pesa más de 40 kilos y está en buen estado
![](https://cadenaser.com/resizer/v2/BIPMC73S2RJSTAAZGHFUTEAVPU.jpg?auth=5f1dd31919ee5d1e4184898d89541d3ea408d4885c0a46f9f70b6e6a1d038ca2&quality=70&width=650&height=365&smart=true)
Rescate de la tortuga. / RA
![Rescate de la tortuga.](https://cadenaser.com/resizer/v2/BIPMC73S2RJSTAAZGHFUTEAVPU.jpg?auth=5f1dd31919ee5d1e4184898d89541d3ea408d4885c0a46f9f70b6e6a1d038ca2)
El pasado 19 de enero el buque de pesca “Estela y Miriam” encontró atrapada accidentalmente en su red de arrastre una enorme tortuga Caretta mientras faenaba.
Los pescadores, siguiendo las pautas de rescate facilitadas por S.O.S CareHa y la Cofradia de Pescadores de Sanlúcar de Barrameda como entidad colaboradora, custodiaron la tortuga a bordo y avisaron al personal de la Cofradía que activó inmediatamente al servicio de emergencia 112 para iniciar el protocolo de rescate coordinado por la Junta de Andalucía.
Una vez en puerto, se depositó el ejemplar en el contenedor proporcionado por el proyecto S.O.S Caretta y estuvo custodiado por personal de la lonja hasta que se personaron los veterinarios del CEGMA de Algeciras, centro de recuperación de la Junta de Andalucía, entidad que apoya el proyecto S.O.S Caretta y responsable de la custodia de estas especies marinas amenazadas.
Estos pescadores se han convertido así en héroes del proyecto S.O.S Caretta, una iniciativa en la que colaboran la Cofradía de Pescadores de Sanlúcar de Barrameda y el Grupo de Acción Local de Pesca Costa Noroeste de Cádiz. “El compromiso del sector pesquero con la protección del medio marino es cada vez mayor, y la labor de cuatro integrantes del “Estela y Miriam” es sin duda un gran ejemplo”, comentan desde la Cofradía los participantes en el proyecto.
Se trata de un ejemplar de la especie Caretta, también conocida como tortuga común o tortuga boba, y según ha informado la Junta de Andalucía es un macho que pesa más de 40 kilos y que tras las primeras pruebas se encuentra en cuidados intensivos con buen pronóstico de recuperación.
El ejemplar ha sido apodado como Bonanza, nombre del barrio de pescadores de Sanlúcar, que da nombre al puerto pesquero y sirve para lanzar además un mensaje de esperanza para esta especie amenazada a nivel global, que utiliza las costas andaluzas como zonas de alimentación y en los últimos años como zona de anidación esporádica en la zona mediterránea.