Enriqueta Barranco: "Fui una intrusa en un mundo de hombres desde que comencé a estudiar Medicina"

Granada

Finales de la década de los 70. En plena transición política, con la sombra de la dictadura sobrevolando la ciencia y la sala llena de bigotes y gafas de pasta dura. Y ella, joven, impetuosa, irreverente. Enriqueta Barranco (Granada, 1950) es una de las primeras especialistas en la implantación de dispositivos intrauterinos (díu) en una Granada en blanco y negro para la que aquel hito estaba más cerca del sacrilegio o la ciencia ficción que de un método anticonceptivo. "Yo era cuanto entré en contacto con esta técnica, y después tuve la oportunidad de formarme y de implantar díus en Granada", relata Barranco con orgullo. El díu, en la Granada de 1979, suponía "una innovación, era de otro mundo, la máxima novedad que había".

Recuerda Enriqueta Barranco -lo hace con una sonrisa queda entre traviesa y amarga- que "fui una intrusa en un mundo de hombres desde que comencé a estudiar Medicina y muchísimo más desde que decidí con 22 años especializarme en Obstetricia y Ginecología".

"Mis compañeros de entonces -prosigue Barranco- siempre me miraron con cierto recelo y tuvieron que pasar años hasta que pude despegarme de esa discriminación que había en la Universidad y que pagúe muy caro por diversas razones".

A Enriqueta Barranco, entre otros muchos avances, la sociedad le debe el diseño de lo que se conoció  -y se conoce- como Servicio de Planificación Familiar, "levantado de la nada", que hoy es un servicio actualizado sobre "salud sexual y reproducitiva que aborda temas que en los años 80 eran impensables".

Escucha la entrevista mantenida con Enriqueta Barranco

Únete al canal de WhatsApp de la SER