Dolores Serrat: "Esperanza frente al fatalismo paralizante"

Zaragoza

No es fácil mirar al futuro con optimismo con la que está cayendo, y sirvan como ejemplo de ello la nueva ola pandémica con la incidencia en alza y la amenaza de nuevas restricciones, el imparable precio de la energía con la consiguiente inflación de efectos negativos en la economía o el avance imparable del nacionalismo populista que, con impunidad consentida por el gobierno, desprecia la ley, la autoridad y las decisiones judiciales. 

Pese a ello, y quizá por el espíritu navideño, tengo esperanza en que las cosas cambiarán, porque todos los problemas tienen solución si como sociedad dejamos de lado el fatalismo paralizante o el conformismo complaciente y exigimos obrar con responsabilidad a quienes tienen el deber de plantear soluciones.

Con esta esperanza les deseo a todos Feliz Navidad  y que el 2022 sea el año de la recuperación y la normalidad.