Un cóctel explosivo
El comentario de Ana Castaño en 'La Ventana de Asturias' (03/12/2021)
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Asturias
Mucho se ha comentado sobre el monumental fiasco de la licitación de las obras de reforma del Hospital de Cabueñes.
En mis comentarios he hablado en varias ocasiones de deficiencias en la gestión administrativa, es un terreno que me es conocido, acumulo más de 30 años como empleada. Generalmente los problemas pasan desapercibidos mientras son sufridos por personas concretas, pero afloran cuando se trata de dar respuesta a situaciones colectivas –recuerden la exasperación ante la lentitud en la tramitación de las ayudas COVID- o cuando la consecuencias son de tal impacto que adquiere trascendencia mediática.
La contratación administrativa es un procedimiento complejo, en el que se precisa de estudios económicos, informes jurídicos, fiscalización, pliegos de prescripciones técnicos y administrativos, toma de acuerdos por el órgano de contratación, nombramientos de mesas de contratación, elaboración de actas, requerimientos, comprobación de documentación.... Así que sus tiempos son, sí o sí, dilatados y, más aun, en una administración que no se caracteriza precisamente por su celeridad.
Y todo ello a pesar de estar regulada por norma reciente, de 2017, otro día hablare de la producción normativa de gobierno de Rajoy que, en general, solo ha venido a añadir complejidad a los procedimientos.
Sin pretender sentar cátedra sobre las razones que explican el fracaso de la licitación me parece que la combinación de una norma compleja, una administración lenta y un personal escasamente motivado constituye un cóctel explosivo que puede hacer naufragar cualquier proyecto.
Quizá sería preciso que se tomara buena nota de estos problemas, más si cabe cuando se tendrá que gestionar próximamente los fondos europeos, ya que de los responsables públicos cabe esperar algo más que lamentos y frustración.
