El esclarecimiento del crimen de Laura Luelmo, pendiente de las testificales y pruebas periciales

Huelva

Segunda jornada del juicio contra Bernardo Montoya por el asesinato de Laura Luelmo en el Campillo en el año 2018. Un juicio que se está celebrando a puerta cerrada en una discutida decisión judicial solicitada por el abogado de la defensa, Francisco Luelmo, tío de la víctima y respaldada por las partes. Bernardo Montoya ratificó el lunes, en la primera jornada del juicio, ante el jurado popular la versión de que fue su ex pareja la responsable del asesinato de la joven profesora. 

En este martes declararán una veintena de testigos, en su mayoría Guardias Civiles, en las sesiones de mañana y de tarde. La versión de los testigos y las pruebas periciales que se sucederán en los días que resten de juicio serán determinantes para esclarecer el caso, además de la declaración del acusado.  

Bernardo Montoya confesó hace tres años, tras ser detenido, tanto en sede policial como judicial, ser autor de los hechos y pidió perdón a la familia, pero meses más tarde, se desdijo, y modificó su versión, culpando a su ex pareja del crimen. Montoya atribuyó toda la responsabilidad del crimen en ella, de la que dijo que "actuó movida por los celos" y que él se culpó "por amor y porque no estaba en condiciones muy idóneas". 

Montoya se enfrenta a una petición de la Fiscalía de prisión permanente revisable por un delito de asesinato y 32 años de cárcel -20 por un delito de detención ilegal y 12 por el de agresión sexual-. La acusación particular que ejerce la familia de la víctima y la acusación popular en nombre de la Junta de Andalucía también han pedido prisión permanente revisable.

La decisión judicial de celebrar el juicio a puerta cerrada ha generado descontento. El colegio profesional de Periodistas de Andalucía califica de "inadmisible" que el juicio se celebre a puerta cerrada. La Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) ha asumido y respaldado el comunicado de la Asociación de la Prensa de Huelva en el que muestra su indignación ante la imposibilidad de informar por el juicio por el asesinato de Laura Luelmo. La Asociación de la Prensa considera un grave error que atenta directamente contra los principios democráticos de un proceso público que la propia Constitución considera un derecho fundamental. 

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