Oviedo no es ciudad para mujeres

Comentario Marisol Delgado 08.11.21
02:01
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Asturias
El gobierno municipal de Oviedo pretende eliminar el homenaje y el recuerdo de ilustres, comprometidas y valientes mujeres, borrándolas de un plumazo de su, muy masculinizado, callejero.
A Concepción Arenal, escritora, experta en Derecho y pionera del Trabajo Social en España; a Gloria Fuertes, prolífica escritora de narrativa, poesía y teatro, perteneciente a la literaria Generación del 50; a María Xosefa Canellada, la filóloga asturiana más importante del Siglo XX, miembro de la Real Academia Española y de la Academia de la Llingua Asturiana; a Flora Tristán, escritora y pensadora, defensora infatigable de la lucha feminista y de la lucha obrera; a Amparo Pedregal, profesora de Historia Antigua de la Universidad de Oviedo, una de las grandes referentes nacionales de la teoría del feminismo desde la perspectiva histórica; a Aurora de Albornoz, escritora, ensayista, crítica literaria y poeta asturiana, importantísima memorialista del exilio español; a Matilde García del Real, pedagoga y escritora, impulsora en 1901 de la primera escuela para mujeres adultas; a Lola Mateos, profesora de Historia Moderna en la Universidad de Oviedo, participante activa de los movimientos en favor de la instauración de la democracia; a Sara Suárez Solís, novelista, articulista y docente asturiana, luchadora incansable por la igualdad; a las Maestras de la República, mujeres que se dejaron la piel y hasta la vida, para erradicar el analfabetismo en España, para que la educación fuera pública y democrática; y a las 13 Rosas, jóvenes torturadas y fusiladas por la dictadura en agosto del 39, ya terminada la Guerra Civil, culpadas de unos asesinatos que no cometieron. "Que mi nombre no se borre en la historia" escribió a su madre una de ellas, la asturiana Julia Coneso.
No permitamos que estas y otras mujeres sean borradas de las calles y de la historia. Porque eso es, simple y llanamente, violencia.