Mota del Cuervo lucha contra el TCA en los centros escolares
Serán talleres impartidos por psicólogos especialistas de AFEBAC, la Asociación de Familiares y Enfermos de Bulimia y Anorexia de Cuenca

Ayuntamiento de Mota del Cuervo / Ayuntamiento de Mota del Cuervo

Las Pedroñeras
En Mota del Cuervo se lucha contra el TCA. ¿Y qué es esto? Pues estamos hablando del Trastorno de la Conducta Alimentaria que afecta en su mayoría a los más jóvenes, aunque también hay adultos que lo sufren.
Es por ello que la localidad moteña, con motivo del Día Mundial de los Trastornos Alimentarios que se conmemora el próximo 30 de noviembre, ha empezado una serie de talleres y actividades de prevención contra estos trastornos.
Los talleres se van a desarrollar en los centros escolares del municipio por psicólogos especialistas de AFEBAC, la Asociación de Familiares y Enfermos de Bulimia y Anorexia de Cuenca
Ana Sepúlveda es su presidenta: "La idea no es hablar de comida, porque no pensamos que el alimento que entra por la boca nutra, pero sí el que entra por la comprensión".
El TCA está aumentando en preadolescentes
Y es que, según Sepúlveda, están aumentando los trastornos en gente cada vez más joven y en mujeres, estaríamos hablando de niñas de 9 o 10 años. Por ello, no hay que llegar hasta los 14 para empezar a concienciar, porque en esa edad ya se ha desarrollado el trastorno.
Entre las actividades habrá un cuentacuentos infantil para niños pequeños, charlas de alimentación para los niños de primaria y talleres de autoestima e influencia de las redes sociales para los adolescentes de secundaria.
"Desde la asociación hacemos talleres a niños y alumnos de quinto y sexto de primaria, además de estudiantes de primero y segundo de la ESO", cuenta Sepúlveda.
No faltará una charla y taller práctico para los padres, los cuales, según Sepúlveda, son esenciales en este tipo de trastorno.