La tinerfeña Michelle Alonso hace historia en Tokio
La nadadora tinerfeña sube a lo más alto del podio de unos Juegos Paralímpicos por tercera vez consecutiva
Michelle Alonso Morales, en el centro de deportes acuáticos de Tokio 2020. / Cadena SER
Santa Cruz de Tenerife
Michelle Alonso Morales hace historia en los Juegos Paralímpicos. La nadadora tinerfeña ha vuelto a subirse a lo más alto del podio en su prueba talismán, los 100 metros braza, donde ya se proclamó campeona en Londres 2012 y Río 2016. Por tales méritos había sido designada abanderada de la delegación nacional en Tokio.
De madrugada en España, Michelle se impuso con autoridad en las series eliminatorias y selló su pasaporte a la final con el mejor tiempo de las participantes (1:13.25) en la modalidad SB14, para deportistas con dispacidad intelectual.
Este domingo a primera hora (de noche en Japón), Alonso ha escrito otra brillante página de su historia paralímpica en el Centro de Deportes Acuáticos de Tokio, idéntico escenario donde lucieron hace algunas semanas los grandes ídolos de la natación mundial. Ella también lo es. Su carrera fue imponente y le aupó al podio, otra vez. Michelle ya es leyenda del deporte paralímpico español.
Alonso acabó emocionada después de rebasar con claridad a todas sus oponentes con un estratosférico tiempo de 1:12.02, casi tres segundos mejor que la británica Fiddes. Este registro marca una nueva plusmarca mundial.
La canaria había iniciado su participación en estos Juegos con una muy meritoria clasificación para la final de los 200 metros braza, una distancia en la que logró un inesperado pero muy valioso octavo puesto en la final. Así se adjudicó su primer diploma en esta cita nipona. Pero el objetivo en el que había depositado todas sus ilusiones era la carrera de los 100. Así lo demostró este domingo, mientras sus amigos y vecinos de La Laguna disfrutaban de su exhibición en una pantalla gigante desplegada por el Ayuntamiento.
Su entrenador, José Luis Guadalupe, ya había advertido de la ostensible mejoría demostrada por sus principales rivales y de la dificultad añadida que suponían estos Juegos por el parón obligado por la pandemia. Michelle supo sobreponerse a todas las adversidades y triunfó otra vez. Lo hizo a lo grande, en una jornada memorable, rebajando su propio récord mundial y dejando grabado su nombre en la historia de estos Juegos.
